Un reporte de olores fétidos desencadenó una investigación por la probable presencia de una fosa clandestina en la colonia Santa Elena de la Cruz en Guadalajara, donde elementos de la policía municipal dieron cuenta al Ministerio Público sobre la posible presencia de un cuerpo al interior de una vivienda.
El reporte, de acuerdo a información de la comisaría tapatía, alertaba sobre algunos olores al interior de una casa en los cruces de las calles Oviedo y Bejar de la colonia ya mencionada, sin embargo, por la naturaleza del caso y de acuerdo a las facultades de cada una de las instancias, los uniformados tapatíos procedieron a resguardar la zona y esperar el arribo de elementos ministeriales.
En ese momento comenzó una investigación sobre lo que se creía podría ser la localización de un cuerpo enterrado en la finca, no obstante, al punto comenzaron a arribar más unidades de la Fiscalía General del Estado y del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses.
De manera extra oficial, se dio a conocer que en el domicilio no sólo se encontraba un cuerpo, sino que al menos podría tratarse de restos pertenecientes a cuatro personas, tres de estas del sexo masculino y una más del sexo femenino sobre las cuales no se tiene mayor información.
Aparentemente, el propietario del inmueble, que no se encontraba habitado, había contratado a trabajadores de obra para que realizaran algunos arreglos a la finca, pues en días pasados, las personas que rentaban el lugar habían decidido dejar la vivienda.
Al momento de realizar trabajos de limpieza, el personal contratado se percató de que el olor fétido no correspondía al de un animal, por lo que dieron aviso a los propietarios y estos a su vez a las autoridades.
Hasta el cierre de esta edición la Fiscalía del Estado no había realizado pronunciamiento alguno sobre los resultados de las diligencias, pero curiosos que se acercaron al lugar de los hechos para observar, señalaron que al menos sacaron cuatro cuerpos de la vivienda.
MC
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