El ciclo se cumple, y una vez más el mundo da la vuelta al sol 365 veces. Durante este tiempo, los hechos noticiosos han moldeado nuestra historia, tanto a nivel global como local.
De igual forma, de manera personal, nuestro entorno ha estado lleno de experiencias con la familia y de amigos.
Podríamos hablar de las elecciones presidenciales, por primera vez, una mujer asumió el cargo más importante del país.
Morena retuvo la presidencia de la República con Claudia Sheinbaum Pardo al frente, consolidando su proyecto político en medio de debates y desafíos.
Podríamos hablar de los desastres naturales, desde inundaciones hasta los incendios forestales que devastaron ecosistemas enteros.
Estos eventos, más que tragedias, se convirtieron en recordatorios de la fragilidad del equilibrio ambiental y de la necesidad de medidas urgentes para enfrentar el cambio climático.
Podríamos hablar de cómo el gobierno federal insistió en su agenda energética centrada en combustibles fósiles.
Mientras el mundo apuesta por energías limpias, México parece resistirse, poniendo en entredicho su papel en el combate al cambio climático.
Podríamos hablar de que, a pesar de “otros datos”, la crisis económica se hizo sentir en los bolsillos de todos, con una inflación que obligó a las familias a replantear prioridades y enfrentar desafíos inéditos.
El costo de la vida subió, pero también fuimos testigos de la creatividad y la solidaridad que ayudaron a muchas personas a seguir adelante.
Podríamos hablar de que Tamaulipas continúa siendo un foco rojo por la presencia del crimen organizado, particularmente en zonas estratégicas para el narcotráfico, en donde el huachicol o el cobro de piso son temas permanentes.
Podríamos hablar de cómo la zona sur de Tamaulipas luchó por mantenerse a flote a pesar de la crisis hídrica.
Pero mejor podríamos hablar de lo que implica comenzar un nuevo año, dejando atrás todo lo malo y retomando las experiencias para ser mejores personas.
Este es un momento para reflexionar, agradecer y soñar con un futuro mejor.
Mis mejores deseos para cada uno de ustedes y sus familias. Que este nuevo ciclo esté lleno de parabienes, salud y momentos felices.
Visualicemos un año lleno de oportunidades y aprendamos de lo vivido para construir un mejor mañana. Dedicada a Víctor Alejandro, Mi Todo.
