A nivel mundial existe el consenso de que dos de los principales impulsores de la contaminación atmosférica y, por tanto, del calentamiento global son la generación de energía eléctrica y la combustión de vehículos de motor que circulan por el mundo. En el área metropolitana de Monterrey, últimamente los problemas en el transporte público o concesionado y la contaminación atmosférica son temas recurrentes en telediarios, sin que se profundice en la relación que existe entre este tipo de contaminación y el parque vehicular presente en la región.
La lógica en los protocolos para cuando existen altos niveles de este tipo de contaminación en varias grandes ciudades del mundo es, en general, la de acotar el uso de los automóviles particulares, y en el caso extremo de muy altas concentraciones, utilizar solamente el transporte colectivo, por lo cual una de las políticas primordiales en estos lugares sería la de impulsar un transporte colectivo eficiente y de calidad, que pueda ser una alternativa viable al particular y pueda con el tiempo ir sustituyéndolo. En el caso de los diferentes gobiernos en Nuevo León, por el contrario, la falta de una política en este sentido –como se puede entrever en el trabajo de Chavarría y Villarreal sobre el transporte urbano en Monterrey, en donde se intuye que desde los años setenta la problemática existente en el transporte concesionado sigue siendo casi la misma– ha generado el uso cada vez mayor de autos privados.
Madrid acaba de hacer público su protocolo y es de llamar la atención que uno de los puntos es bajar la velocidad en vías rápidas a 70 km/h para reducir la contaminación, algo que debería meditar el gobierno nuevoleonés, pues al mismo tiempo atacaría también la alta cantidad de accidentes de tráfico que se dan en la zona, generalmente por falta de conciencia e imprudencia de los conductores (por decir lo menos) y del gobierno estatal, que en papel hace muy buenos reglamentos de tránsito, pero que sin su debida supervisión en la calle son letra muerta.
JOSÉ RAÚL LUYANDO CUEVAS
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