Teje y maneje del Presupuesto

Pensé que el manejo del Presupuesto Estatal de Egresos incendiaría a empresarios, líderes o la ciudadanía en general, y no. Parece que Shakira y Piqué nos mantuvieron claramente ocupados. El que un grupo de alcaldes negociara una partida extra de 2 mil 500 millones para 28 de sus municipios, como requisito para destrabar el presupuesto del 2023, es una pena. Si esto pasa en Nuevo León, donde el nivel educativo es más alto, ¿qué pasará en el resto de los estados?

Definitivamente la política sigue siendo “vieja” y de simulaciones; nos peleamos, te presiono, hago show dos meses y luego, así sin más, con dinero arreglamos todo. Y tuvieron apenas resistencia, de lo que parece ser una burla al resto de los 23 municipios que quedaron fuera del fondo. Muchos de ellos en la periferia y con grandes necesidades. Y ni hablar de los diputados, que sin mucha discusión aprobaron el Presupuesto.

El gobernador, para neutralizar una negociación carente de claridad y soporte técnico, optó por ampliar el fondo hasta 3 mil 500 millones para beneficiar al resto de los municipios. Pero eso sí, el primer grupo de los 28 ya lo tienen asegurado, el resto se lo tienen que ganar registrando proyectos de obra pública o seguridad. Todo esto para crear un simulado equilibrio con municipios que no pertenecen al Pacto Nuevo León.

¿Quiénes ganan? Los de siempre. El PRI y en PAN, en principio. Doce municipios gobernados por cada uno de ellos, tres de Morena y el independiente de García arrancan con suerte el año, tras la negociación. Al no mostrar molestia los alcaldes de MC, excepto Colosio, entendemos que ellos a la vez tiene su dulce. Y si le sumamos lo que los tres partidos recibirán del INE este año 12% más de fondos que el año pasado, para sus actividades ordinarias permanentes, ojo, no electorales, pues sí salieron ganones.

Como parte de los arreglos se reactivó la Mesa Metropolitana de Alcaldes, que justo lo que pretende es coordinarse y trabajar para el bien común eso que parece que solo aplica en la carrera y no en la práctica profesional. Lo que nos dejaron ver con el teje y maneje del presupuesto fue de una muestra de lo que impera en nuestra política, la realpolitik.