“Si todos forman un solo pueblo y todos hablan una misma lengua; siendo este el principio de sus empresas, nada les impedirá que lleven a cabo todo lo que se propongan”
Génesis
El que los directivos sepan comunicar de manera organizada y precisa los objetivos, metas y expectativas de la organización, comunicando claramente el desempeño esperado, compartiendo y recibiendo retroalimentación sobre los fines comunes, propicia que exista eficiencia en los equipos de trabajo y un buen ambiente laboral.
El estilo de comunicación de los directivos permea a toda la organización.
Por lo que, una buena comunicación entre la alta dirección y los colaboradores propicia una mejor comunicación entre compañeros de trabajo.
Sentir que se trabaja en equipo por metas y objetivos comunes, que las sugerencias y opiniones se toman en cuenta, lleva al personal a sentirse valorado y más satisfecho en el trabajo, generando un mayor sentimiento de pertenencia hacia la organización, por lo que es importante privilegiar las habilidades de comunicación y trabajo en equipo entre los candidatos a ocupar vacantes de puestos directivos.
Los directivos que comunican de manera vaga o ambigua los objetivos y metas de la empresa, o que en casos extremos no los comunican, ocasionan confusión entre el personal, que trabaja sin saber exactamente qué es lo que se espera de ellos.
Una mala comunicación de los directivos con las diferentes áreas o departamentos puede hacer de la organización una especie de “Torre de Babel”, en donde los integrantes parecen hablar entre ellos en diferentes idiomas, de modo que no se entienden los unos con los otros.
Esto resulta en evaluaciones del desempeño poco claras que pueden terminar contaminando el clima laboral.
