Aunque millones de nosotros no pudimos ir al cine el pasado fin de semana a ver a la heroína de DC Comics romperlo todo otra vez, donde sí se pudo la gente fue.
Y el resultado fueron más de 85 millones de dólares en la taquilla mundial, esto incluyendo los 2 mil 150 cines de EU donde se estrenó y excluyendo números concretos (porque las métricas exactas aún no se hacían públicas) de las personas que tienen HBO Max en aquel país, y la pudieron ver también en esa plataforma, al mismo tiempo que en los cines.
Así que cuando digo que La Mujer Maravilla lo rompió todo, empecemos por las ventanas. Especialmente esa de tres meses en la que las salas de cine se negaban firme y a estrenar nada que fuera a estar disponible en otro lado o formato por tres meses. Warner Bros. ya anunció que así vendrán sus próximos 16 estrenos y que la taquilla de los cines no se recuperará hasta 2022.
Ahora, dentro de toda esta situación se anuncia que ya se le dio la luz verde a la tercera entrega de Wonder Woman, también escrita y dirigida por la gran Patty Jenkins, quien apenas la semana pasada había declarado que no la haría, si la idea era que fuera directo a la pantalla chica, pensando ya en un futuro sin pandemia. Podemos suponer, entonces, que este es el primer paso que demuestra el deseo y la intensión de los grandes estudios de seguir haciendo sus grandes estrenos en el cine. Disney, que levantó corazones este fin de semana con Soul de Pixar, ya había dicho que “depende del sapo será la pedrada”, pero la batalla por el regreso a la pantalla grande como origen parece haberse anotado un gol con la promesa de la cinta que nuevamente será protagonizada por Gal Gadot.
Twitter: @susana.moscatel