Gregory Maguire, novelista y creador de Wicked, es un prolífico autor que ha encontrado el modo de adentrarse en la cultura popular reimaginando las circunstancias de personajes clásicos de la fantasía y ahora todo mundo sabe, al menos por Wicked, su más exitosa novela, que existen esta serie de libros que exploran las motivaciones, experiencias y secretos de aquellos que pensábamos conocer tan bien: en este caso los personajes de El mago de Oz.
Por ello, resulta muy emocionante para los fans de los libros, del musical y ahora de la película, saber que en solo dos semanas estará a la venta la precuela de este título, basada específicamente en la infancia de la bruja Elphaba: su familia disfuncional, su relación especial con los animales y todo lo que la vuelve la poderosa bruja en la que sabemos que se convertirá.
La cinta tuvo más tiempo de explorar no solo el musical, sino el libro del que este se origina, pero aún hay cosas que a muchos nos emociona saber sobre cómo se construyó esta versión de “la bruja mala del oeste”, y que reta, literariamente, a la novela (y cinta) original de El mago de Oz con sus particularidades.
En tiempos en los que los contenidos más consumidos parecen ser breves momentos en video, la exploración de historias que solo nos habían contado de una manera, resulta un deleite. Sobre todo por el éxito que Wicked ha tenido en el escenario, en el cine y sí, en las librerías.
Ya pude leer un adelanto de Elphie, A Wicked Childhood, y puedo decir que me emociona enormemente ver que esta historia, que ya es de todos, se va a seguir contando.