Los comportamientos observados en AMLO entorno a las Fiestas Patrias, son realmente preocupantes, pero sobre todo inaceptables si tenemos un poco de cordura, y sin negar la realidad reconocemos que el discurso del cambio del mandatario se basa en tres falsas declaraciones:
no robar, no mentir y no traicionar, y en insistir en una visión sesgada asumida como verdadera e irrefutable y defendida desde la constante y enfermiza provocación y división social de los mexicanos repugnando a quienes no piensan como él; comportamiento que ya acusa trastornos a la razón por lo cual lo vemos a veces optimista y eufórico hasta parecer buena gente, para luego pasar al mal genio y a la irritabilidad extrema e intolerancia con expresiones que exponen su convicción de creerse inusualmente importante, talentoso, poderoso, hipomaniaco diría yo, haciendo cosas arriesgadas que muestren su falta de juicio.
Ha hecho a un lado algo fundamental de nuestro sistema jurídico-político e histórico aportado por el gran Morelos uno de los héroes en que justifica sus acciones y fue el principio plasmado en los Sentimientos de la Nación: 5º.
Que la soberanía dimana inmediatamente del Pueblo, el que solo quiere depositarla en sus representantes dividiendo los poderes de ella en Legislativo, Ejecutivo y Judiciario, eligiendo las Provincias sus vocales, y éstos a los demás, que deben ser sujetos sabios y de probidad.
Principios refrendados en los títulos 3º, 4º y 5º de la Constitución de 1824; en las secciones I, II y III del Título 3º de la Constitución de 1857 y desde luego en la Constitución de 1917, en los Artículos 49, 50, 80y 94 en su versión vigente.
En un rasgo plenamente dictatorial desconoció a los poderes legislativo y judicial simplemente porque no están las cabezas institucionales de estos poderes a su disposición y obediencia.
Por otro lado, como constancia facciosa del manejo del principio de no intervención fundamental para México y en contradicción a la vocación mexicana de defender aquí y en el mundo los derechos humanos, invitó a la máxima celebración nacional a naciones donde existen gobiernos dictatoriales, su justificación:
ser gobiernos que dicen tener filiación de izquierda, aunque caídos en dictaduras, tal y como impuramente se asume la 4T.
Comportamientos que desde luego prenden alarmas.