Mucho se han involucrado todos los diputados en criticar la Ley de Ingresos con base en sus supuestos optimistas.
Diseñar el ingreso federal es un acto de predecir eventos hacia adelante, pero también considerando qué tan bien predijimos los ingresos de años pasados con respecto de los que realmente se dieron.
El ejercicio hacia adelante es particularmente difícil en estos tiempos de alta volatilidad derivada de eventos inesperados como la disrupción en las cadenas globales y su principal causa, el conflicto de Ucrania con Rusia. SHCP decidió entonces determinar sus ingresos con base en una vista hacia adelante muy conservadora, y considerando qué tanto pudo predecir los ingresos de años pasados, además de establecer como ancla la disciplina fiscal que tan bien nos ha funcionado.
Así, mientras el balance público (ingreso menos gasto) crece de -3 a -3.6% del PIB, realmente crece por la subida en las tasas de interés que afectan el pago de la deuda, ya que el balance primario sin costo de la deuda baja de -0.3 a -0.2%.
Los ingresos no petroleros han crecido en 2022 un 5%, por encima de lo programado, por lo que este año se observa un crecimiento presupuestario similar.
La deuda acumulada este año fue presupuestada en 51%, pero gracias a la estrategia fiscal se estima terminar en un 48.9% y crece en la Ley de Ingresos a un 49.4%, por debajo de la autorizada el año pasado. Cabe mencionar que éste índice en 2018 fue de 53.6% e incluso superior en años anteriores.
Con respecto del crecimiento económico, los pilares son el crecimiento observado en el consumo interno y el crecimiento en el sector industrial de EU, a pesar de su bajo crecimiento económico en general. Pero es importante mencionar que el efecto de este crecimiento en los ingresos no tributarios fue ajustado a la baja con respecto del observado en 2022, porque los ingresos han crecido no nada más por el crecimiento en el PIB, sino significativamente por los esfuerzos tributarios de incluir a grandes contribuyentes. Por lo que el crecimiento proyectado en los ingresos correspondería a un crecimiento del PIB de aproximadamente 1.3%.
Juzgue usted, querido lector, si la Ley de Ingresos son números alegres.
Patricia Armendáriz
@PatyArmendariz