Uno de los argumentos de los legisladores de Morena y el mismo gobierno para extinguir los 109 fideicomisos es que los recursos financieros no desaparecerían.
La corrupción, según el gobierno y los legisladores del partido oficial, fue una de las razones para desaparecer los fideicomisos, acabar con intermediarios y entregar recursos de manera directa a beneficiarios.
Además de los fondos y fideicomisos eliminados relacionados a la ciencia, el arte, la cultura y la salud, destacaba el Fondo de Desastres Naturales (Fonden). El uso de recursos del Fonden, de acuerdo con la narrativa construida para su desaparición, es que los gobiernos cometían actos de corrupción en la aplicación del fondo para damnificados y en reconstrucción.
Nadie, a la fecha, está preso por haber hecho mal uso de los recursos del Fonden, por actos de corrupción, lo que comprobaría lo afirmado por el partido y el gobierno.
Desaparecidos los fideicomisos, nadie sabe del fondo financiero para apoyar a la población en situación de desastre, como ocurre en Tabasco.
Es la población civil la que está en las calles, o en el agua, en lanchas, repartiendo víveres a cientos de familias atrapadas en las azoteas de sus casas, debido a las inundaciones.
Lo mismo ocurre en las ciudades; civiles se organizan para instalar un centro de acopio para ayudar a los damnificados, apelando a la solidaridad.
De acuerdo con imágenes de las televisoras, familias tabasqueñas sufren de hambre, han perdido su patrimonio o negocios por las inundaciones y claman ayuda gubernamental, misma que no llega. Dónde están los recursos financieros aprobados en el Presupuesto de Egresos del 2020, porque de acuerdo con el decreto de extinción del fondo, el 31 de diciembre es la fecha límite en que los recursos del Fondo para la Atención de Emergencias puedan utilizarse ante una declaratoria de emergencia.
Con la extinción del Fonden, y sin los cerca de 4 mil millones de pesos del fondo destinado a Puebla, el gobierno deberá planear cómo tener sus propios recursos porque la actividad volcánica, los terremotos, las inundaciones por lluvias y los siniestros por la red de Pemex, son riesgos permanentes a la población.