Siempre se ha dicho que la Selección Mexicana debe ser el rival a vencer en la Concacaf, porque simplemente, tiene una infraestructura que la ha hecho crecer, por su constancia en los Mundiales de futbol, y porque su nivel le ha permitido ganarle a combinados fuertes a nivel mundial.
En fin, por eso, se dice que en el papel, México es el gigante del área. Sin embargo, los rivales de la Concacaf tienen ese claro objetivo de que vean que no son tan débiles como los han retratado. Por eso, cada vez que enfrentan al Tricolor, se valen de todo –esto incluye patadas- para derrotar al combinado mexicano o al menos, para sacarle un buen susto.
Es así como México ha estado cerca de no clasificar a Mundiales al verse abajo ante escuadras de la Concacaf o sus técnicos han sido duramente criticados por las actuaciones ante estos combinados, ya sea por una derrota, un empate o hasta por ser eliminados como le sucedió a José Manuel de la Torre en el 2013, cuando fue juzgado porque su equipo fue derrotado por Panamá en semifinales. Esta edición tampoco arrancó de la mejor manera, un empate sin goles ante Trinidad y Tobago no era lo esperado, si se toma en cuenta el nivel que había mostrado el Tricolor en la era de Gerardo Martino.
Lo que sí, es que se ha caído en la delantera con la ausencia de Raúl Jiménez, quien sigue en su proceso de recuperación, tras una fractura de cráneo. En el primer año de Martino al frente del combinado nacional, se marcaron 47 goles en 17 partidos. En este 2021 registra ocho duelos disputados y nueve goles a favor, situación por la cual se ha presionado mucho al equipo mexicano. El próximo duelo es ante Guatemala, en su segundo compromiso de la Copa Oro, así que, veremos si México logra reivindicarse en dicho encuentro, ante un rival que llegó de última hora ante la baja de Curazao, que presentó varios casos de covid-19.
Minelli Atayde