Si bien el caso de Luka Romero despertó una molestia fuerte en la Federación Mexicana de Futbol, ya que es un jugador que no tenían en el radar hasta que su nombre comenzó a sonar fuerte, ahora la dirección general deportiva insiste en otro futbolista con doble nacionalidad, para que acepte defender al Tricolor.
Se trata de Benjamín Galdames, hijo de Pablo Galdames, mediocampista chileno, quien jugó para La Máquina de Cruz Azul en dos ocasiones (2001-2002 y en el 2003), así como en el Veracruz (2002). Ahora, el equipo que comanda Gerardo Torrado ha estado muy atento a su desempeño, y el entrenador de la selección Sub 20, Raúl Chabrand, también lo ha estudiado a detalle, por lo que Galdames ya recibió una convocatoria por parte de México.
Aquí el problema es que el Vidalcito, como lo han llamado en Chile, ya ha entrenado con el combinado andino, situación que le complica en cuanto a tomar la oportunidad que le da el conjunto azteca, pues al final en el país sudamericano ha comenzado su trayectoria profesional.
El futbolista aceptaría el llamado del conjunto mexicano, pero sin duda, tendrá que decidirse. Si bien no será el único caso, hay que destacar la labor de visorías y pláticas que se llevan a cabo para captar a estos talentosos jugadores que tienen doble nacionalidad y que muchas veces, como sucedió con Luka Romero, su otra selección se adelanta porque no se da un llamado a tiempo.
Ya en el pasado, en otras gestiones, se han hecho labores similares, una de las más recientes en las que el Tricolor logró quedarse con el futbolista se dio con Jonathan González, a quien convenció el entonces director de selecciones nacionales, Dennis Te Kloese, de dejar atrás el poco recorrido que tenía con Estados Unidos para unirse a México. Eso sí, nunca se les garantizan las convocatorias, ni que serán titulares indiscutibles, más bien solo se les presenta el proyecto en turno. Incluso, en el tema de González, nunca ha sido un elemento indispensable para los entrenadores.
Es así como hoy en día se trabaja en selecciones nacionales para captar el mayor talento posible en las divisiones menores.
