Comentaba la semana pasada del potencial de nuestra región para aprovechar sus condiciones climáticas, pero ¿cómo vamos a hacer de La Laguna la capital de la energía solar?
No solo tenemos 300 días de sol al año sino también más de 60 universidades, cincuenta mil alumnos y muchos maestros capaces de generar tecnología local para innovar en la producción de energía y calor que mejore la vida de los laguneros.
La mezcla de recursos estatales, federales y municipales sumado al talento de nuestros académicos y estudiantes sin duda puede hacer posible que para 2040, Torreón y La Laguna sean ejemplo mundial del uso de tecnologías e innovación para preservar el medio ambiente y mejorar la calidad de vida.
Friburgo pasó de ser una ciudad bombardeada en la segunda guerra mundial a ser la ciudad más ecológica del mundo y Pittsburgh pasó de ser una ciudad industrial contaminada, a ser ejemplo de protección al medio ambiente sin sacrificar su vocación productiva. Lo mismo podemos lograr en La Laguna.
Nuestra región creció con una sociedad participativa e innovadora y hoy esta alianza de gestión gubernamental y universidades puede llevarnos a que en 20 años, más de la mitad de la energía de nuestras ciudades provenga de nuestro recurso más abundante: el sol.
Sin embargo esto no es solo una visión a largo plazo, muy pronto con la unión de recursos y talentos, miles de laguneros podrán ahorrar más de la mitad de lo que hoy pagan en luz y gas, y debemos comenzar con quienes mayor proporción de sus pocos ingresos los gastan en estos bienes.
Por ello, la mejor política social es la que invierte a largo plazo en la calidad de vida de una familia, ahorrar y cuidar el medio ambiente con fotoceldas y calentadores solares que tienen una vida útil de más de veinte años es sin duda una buena inversión.
De esta forma Laguna Solar será una realidad.