Todas las estimaciones respecto a lo que podría suceder en cada país donde ingresa el coronavirus, causante de la enfermedad denominada Covid-19, están basadas en experiencias vividas por China, el gigante asiático, donde se dieron a conocer los primeros casos del mal que hoy afecta al mundo.
Y es que Wuhan, la capital de la provincia de Hubei, con 11 millones de habitantes, representa una excelente referencia para hacer estimaciones en el resto del mundo, al ser la primera ciudad donde apareció este virus que hoy tiene en vilo incluso a la economía mundial.
Así que, tomando ese ejemplo desmenucemos lo que va a suceder en México. En Wuhan, el coronavirus infectó al 70 por ciento de la población, si en México se cumplen las expectativas de ese porcentaje de la población, estaríamos hablando de un total de 90 millones de personas, que contraerán el coronavirus, para evitar llegar a esa cifra la mejor medida es el aislamiento social y extremar las medidas de higiene.
Si se alcanzara, de esas desarrollarán el Covid-19 unas 250 mil, de acuerdo a estas estimaciones tomadas por la Secretaría de Salud Federal, unas 175 mil buscarán atención médica, 35 mil requerirán hospitalización, 10 mil irá a terapia intensiva y se registrarán alrededor de 4 mil fallecimientos.
De este modo, en Guanajuato el pico de contagios sería de 3 millones y medio de personas, el estimado de personas que desarrollarán a enfermedad es de 9 mil 450, de ellos buscarán atención médica 6 mil 615, mientras que con tratamiento ambulatorio serán unas 5 mil 200, y 900 personas aproximadamente requerirán hospitalización, 400 irían a terapia intensiva y el número de muertes sería de 165, de ceñirse, insisto, a cifras que esperamos sean menores con la prevención de los ciudadanos y la medidas tomadas por las autoridades locales.
Como dato le comento que justo cuando el gobierno chino aisló la ciudad de Wuhan, el 86% de las personas contagiadas habían pasado inadvertidas. Aquí se ha apostado por lanzar una campaña de detección de casos aplicando pruebas a personas con algún síntoma.
Las pruebas a las personas con síntomas leves acercarán el número de casos oficial al número real, pero no lo alcanzarán del todo mientras no se hagan pruebas a la población asintomática, lo cual se antoja difícil que ocurra.
La pérdida de una sola vida es importante, no se subestima, pero en términos de afectaciones globales siempre es importante tener la visión amplia del panorama por todo lo que implica.