El yoga fortalece de manera natural la zona del abdomen o el core, así como los músculos y órganos que lo conforman, permitiendo tomar conciencia de su importancia a nivel motriz, biológico y energético. Prácticamente todas las asanas activan los músculos abdominales, incluido el transverso, lo que permite mantener una posición estable y equilibrada sin riesgo de lesión en otra parte del cuerpo.
Continuando con el tema de la semana pasada, en la zona abdominal está el núcleo físico y energético del cuerpo; ahí se ubica Manipura o el chakra del ombligo. Este centro de conciencia es también el eje de donde surge la voluntad, el poder y el sentido de dirección, lo que puede tener su parte oscura también hablando de soberbia y orgullo. Es alimentado por el fuego del plexo solar y se asocia con las glándulas suprarrenales y el sistema digestivo. Es la fuerza que impulsa a la acción y al logro de los objetivos de vida.
“El centro del ombligo —según apunta hispayoga.com— es nuestro principio. Es el primer punto a través del cual un ser humano recibe alimento y energía para vivir como feto en el vientre de su madre. Una vez que termina la conexión física con la madre, el centro del ombligo continúa su función en un plano más sutil: es el área que recolecta la energía del cosmos”.
Así, el tercer chakra es la fuente de reserva de energía del cuerpo. Esta reserva se fortalece y pasa después por dos canales hacia la base de la columna, despertando la energía cósmica o Kundalini, enroscada en la base del coxis, en el primer chakra, que empieza entonces su viaje ascendente a través de la columna vertebral.
Tres asanas para un abdomen fuerte
•Navasana o la postura del Barco. Combina el trabajo de la musculatura abdominal junto con la de la espalda y el equilibrio.
• Setu Bandha Sarvangasana o la postura del Puente. Permite elongar el pecho, el cuello y toda la columna al mismo tiempo que fortalece los músculos de la espalda, el abdomen y los glúteos.
•Uthitta Chaturanga Dandasana o Plancha Alta. Aumenta la fuerza del torso y mejora el equilibrio. Además, tonifica abdomen y glúteos.
Como explica el portal sportlife.es, “a lo largo de una sesión de yoga, es importante mantener la conciencia en el abdomen pero sin rigidez; activar ligeramente los bandas o candados energético-musculares que ayudan a proteger la columna y energizar la zona abdominal; y finalmente entender cómo utilizar los músculos abdominales como estabilizadores. Todo esto mejora la capacidad de movimiento, no solo durante la práctica de yoga, también en el día a día”.
(Con información de hispayoga.com y sportlife.es)
@marien_caminoa7