El poder curativo de las depuraciones físicas y mentales se conoce desde tiempo inmemorial. Los ayunos, por ejemplo, han sido utilizados por diversas culturas y tradiciones espirituales para que una vez vacío el cuerpo de sustancias materiales, pueda llenarse con más fuerza del “espíritu” o de energía vital.
El yoga, por su parte, tiene muchas y variadas formas de desintoxicar y equilibrar el cuerpo, y una de ellas es la práctica de asanas. De acuerdo a Frances Murchison, autora del libro Heal your whole body, “las asanas de yoga fortalecen, desintoxican y ponen en balance al organismo. Estas posturas estimulan el anillo órgano interno conformado por hígado —el gran depurador del cuerpo—, páncreas, bazo y riñones”.
De entrada, la familia de las posturas de torsión puede resultar excelente para este propósito, en tanto que al liberar la presión generada durante su práctica, el flujo de sangre que se interrumpió vuelve a entrar con fuerza, limpiando y oxigenando órganos, glándulas y músculos.
Ilustración: Juan Carlos Fleicer
Ardha Matsyendrasana, el Rey de los Peces y de las posturas de torsión, por ejemplo, es altamente beneficiosa pues el giro profundo que se realiza ayuda a ejercer presión sobre los órganos abdominales, que a su vez se fortalecen y estimulan.
Otra postura que ayuda a desintoxicar el cuerpo es Ardha Baddha Padma Paschimottanasana, la Media postura del Loto atado con estiramiento intenso de la espalda. Esta posición estimula el hígado y los riñones y mejora la digestión y el riego sanguíneo de todo el organismo. El talón presiona el abdomen inferior izquierdo del primer lado y el abdomen inferior derecho del segundo lado. Como resultado, el colon descendente y ascendente se masajean respectivamente.
Las posiciones invertidas, por su parte, drenan el fluido linfático acumulado en las piernas y la región superior del cuerpo, por eso Sarvangasana o la Vela, es una gran postura para hacer al final de una práctica de yoga, ya que las toxinas liberadas durante la sesión se envían hacia el corazón para que se oxigenen y se limpien.
Y aunque el objetivo último del yoga es lograr el “cese de las fluctuaciones mentales”, como dice el sabio Patanjali en el segundo de los Yoga Sutras, simultáneamente al detox físico, necesario para lograr pasar a los siguientes niveles, sucede el detox mental y espiritual.
(Con información de yogaenred.com y ashtangayoga.info)
Marién Estrada
@marien_caminoa7