Política

Cieneguillas: 17 muertos y un sistema podrido

  • Columna de María Soledad Luévano Cantú
  • Cieneguillas: 17 muertos y un sistema podrido
  • María Soledad Luévano Cantú

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A finales de 2019 y principios de este año, Zacatecas vivió una serie de actos violentos al interior del Centro Regional de Reinserción Social de Cieneguillas, que terminó en la masacre de 17 personas.

Los muertos eran internos del Cerereso bajo la custodia del gobierno del estado de Zacatecas. Los medios oficiales trataron de vender lo sucedido como una riña, pero pronto quedó claro que no fue una riña, ni un motín, FUE UNA MASACRE que ocurrió por la complicidad y omisión de las autoridades de Zacatecas, de otra forma no se puede explicar cómo ingresaron las armas y la facilidad con la que se movieron los internos que realizaron la matanza.

Para nadie es novedad que en ese centro penitenciario mandan los delincuentes y las autoridades obedecen, por eso cuando la Comisión Nacional de los Derechos Humanos alertó al gobierno de Zacatecas que en dicho penal había problemas graves de ingobernabilidad que se traducían en un autogobierno, las autoridades tomaron ese diagnóstico y lo lanzaron al bote de la basura.

Un día antes de la matanza, las autoridades de Zacatecas habían presumido un operativo donde decomisaron armas, drogas y celulares. Al día siguiente, 16 internos fueron brutalmente asesinados ¡con armas de fuego! y las autoridades no hicieron nada para evitar la masacre. Más aún, al otro día —cuando se suponía que la autoridad había reforzado el control y la custodia del penal— otro reo fue salvajemente asesinado en las narices del secretario de Seguridad Pública del estado de Zacatecas.

¿Cómo se puede explicar lo ocurrido en Zacatecas?

Es sencillo: o las autoridades son muy ineptas o están coludidas con los criminales. No hay otra manera de explicar la masacre que ocurrió en Cieneguillas.

Por cierto, cuando todo esto pasó, el gobernador estaba de vacaciones en Cuernavaca, su secretario de Gobierno se escondió y el único que atendió la crisis fue el secretario de Seguridad Pública, quien reiteradamente ha sido señalado por algunos grupos de la delincuencia organizada de proteger a sus rivales.

En medio de la tragedia, uno de los pocos que entendió la profundidad de la crisis fue el secretario de Seguridad Ciudadana, Alfonso Durazo, que declaró que no le daría “ninguna concesión al crimen uniformado que protege al crimen organizado”.

No nos hagamos tontos, mientras las instituciones sigan llenas de cómplices, corruptos e ineptos no habrá manera de garantizar seguridad a los ciudadanos.

El sistema penitenciario mexicano requiere un cambio profundo. Es indispensable mejorarlo para mejorar la seguridad en nuestro país. Por eso, en el próximo periodo legislativo voy a promover una iniciativa para que los centros penitenciarios dejen de ser escuelas del crimen y se conviertan en verdaderos centros de reinserción social, eliminando el ocio a través del trabajo, el deporte, el estudio y las artes.

Además, presentaré una iniciativa para crear la Policía Penitenciaria, dependiente de la Guardia Nacional, con mecanismos que eviten la complicidad e integridad física de los custodios.

* Senadora

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Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
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