Estos son al menos 10 factores que van a incidir en la elección presidencial de 2024, la renovación del Congreso federal y algunos congresos locales, gubernaturas y alcaldías, a lo largo y ancho del país.
1. Alito Moreno, cuya permanencia en la dirigencia del PRI es ya un lastre para este partido y sus aliados. Si se va, gana Ya Sabes Quién; si se queda pierde la oposición.
2. Marcelo Ebrard. De ser ungido, tendrá literalmente una nalga en la silla presidencial, pues su carácter de moderado lo pone en el ánimo de propios y extraños. Si no se ve favorecido por la voluntad suprema del patrón, podría emprender la aventura por su cuenta o bajo las siglas de Movimiento Comparsa, quiero decir, Naranja, ya sea sumando al resto de la oposición o emprendiéndola por su cuenta como les gusta hacerlo.
3. Ricardo Anaya, quien es el mayor responsable del ascenso de quien ahora lo persigue. Fue él quien usurpó la candidatura del principal partido opositor para acabar realizando una campaña absurda y perdedora que le dejó el camino libre al actual presidente, no sin antes bautizarlo como Ricky Riquín Canallín.
4. Margarita Zavala, que un día comprendió que no sabe hablar en público y que flaco favor le haría a la oposición volviéndose a anotar por la grande.
5. Colosio Chico, a quien todavía ven chico para las grandes ligas y que podría esperarse un sexenio para madurar, crecer políticamente y depurar a su equipo que hoy consiste en solo un par de incondicionales que lo miran embelesados.
6. Ricardo Monreal. Remitirse al númeral 2, sustituyendo Ebrard por Monreal, suprimiendo la palabra moderado y preservando el tono anaranjado.
7. Claudia Sheinbaum, quien representa lo más puro del lopezobradorismo, pero sin el carisma de su líder, o sea, el peor de los mundos, al carecer de la autenticidad, perseverancia e inteligencia de quien gobierna este país y del respaldo que lo llevó y sostiene donde aún está. En caso de ganar, el gobierno de Claudia convulsionaría aun más a este ya de por sí convulsionado país.
8. Adán Augusto. Imposible de diagnosticar al día de hoy, por más que se la pase de gira artística buscando darse a conocer, en vez de hacerlo asumiéndose como un auténtico secretario del interior, capaz de ordenar y pacificar al país.
9. Marko Cortés, quien está dejando pasar la oportunidad histórica, única e irrepetible de convertirse en el verdadero líder de la oposición, haciendo valer su papel, unificando no solo a la oposición sino al México no alineado, inaugurando y encabezando la restauración de la normalidad democrática e institucional del país.
10. El verdadero “tapado”. Aquel que aun no se sabe, ni se ve, ni se asoma, pero que puede ser el candidato que millones están esperando no para que regresen los unos y se vayan los otros, sino para aspirar por fin a un verdadero régimen democrático que ponga fin al viejo sistema de partidos, alienado por unos cuantos y negado a la gran mayoría de las y los mexicanos, lo mismo que sus oportunidades, riquezas, bienes y servicios públicos, satisfactores y libertades, reservados para quienes han detentado el poder de ayer y hoy. Ojalá no así el de mañana.
