Y Ana Guevara dejó en claro lo que ha sido como persona: una oportunista. Siempre en busca de protección de los grandes.
Tras el viaje y el triunfo del equipo de nado artístico en Egipto, se derramó la gota del vaso que ha llenado con sus actitudes y comportamientos bajunos la presidenta de la Comisión Nacional del Deporte, a través de los poco más de 4 años que lleva al frente del organismo rector del deporte mexicano.
Y no titubeó al responder a su dicho por el equipo de natación artística, que ganó el oro en la Serie Mundial en el país egipcio en la modalidad equipo técnico el pasado fin de semana. Respecto a que las atletas mexicanas tuvieran que vender trajes de baño para costear sus gastos, rechazó soberbia -fiel a su costumbre- que la dependencia que encabeza no haya proporcionado apoyo a las hoy afamadas nadadoras.
Y quiera o no, lo rechace o acomode a su arbitrio como lo fue en su brillante quehacer deportivo, la Guevara ha dado patadas de ahogada por su falta de talento como “dirigente” de la Conade.
En abierto parafraseo a su jefe máximo, el presidente López Obrador, la Comisión Nacional del Deporte “está podrida de arriba a abajo”. Así se ha comportado la sonorense con todos los deportistas de talla internacional que han solicitado apoyos económicos para viajes y giras fuera de México.
Empero, la multireferida “presidenta” de la Conade ha negado fondos públicos a atletas y entrenadores por invenciones de su ya amañada administración. A todos les ha reiterado que deben comprobantes de los viajes hechos, incluso muchos de los efectuados hasta antes de la administración lopezobradorista.
Pese a lo que afirme, Ana Gabriela Guevara ha desarrollado el papel más indecoroso de su vida, convirtiéndose en la dirigente deportiva más cuestionada desde que fue creada la Conade en el sexenio de Carlos Salinas de Gortari.
En referencia a la negativa de apoyo al equipo de nado artístico, ufana y fastidiada, la subcampeona olímpica de 400 metros planos en los Juegos de Atenas en 2004 reiteró que dijo que no le importa lo que vendan las integrantes del equipo de natación artística, esto luego que no han podido comprobar los gastos que han hecho a lo largo de varios periodos.
Y aseveró, no le importa lo que hagan para viajar.“Por mí, que vendan calzones, trajes de baño, Avon o Tupperware… pero ellas y sus entrenadoras son deudoras.
Como si fuera de su bolsa, adujo “les hemos dado 40 millones de pesos y no los han justificado. El equipo de nado artístico, las atletas son deudoras dentro de la Conade por 2 millones de pesos del ejercicio 2016-2018 que no han logrado comprobar”.
Y así se comporta la otrora brillante atleta que atacaba a los dirigentes por su incongruencia. ¿Y ella cómo se comporta? Ver para creer. Cómo cambia el poder a la gente. Pobre deporte mexicano con esta dirigente. Lo mejor es que ya solo le queda en el cargo -al igual que a AMLO- 16 meses y 12 días.
Notas de Trascendencia
Olvidándose de su largo pasado de ex priista, -como si en verdad el poblano Alejandro Armenta fuera impoluto- indicó que podrá demandar penalmente a la ministra Norma Piña, presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación por los mensajes recibidos en su teléfono personal.
Sin embargo, Armenta Mier está en su afán de querer impresionar al presidente López Obrador para que lo convierta en abanderado de Morena a la gubernatura poblana.
De acuerdo a los textos que le envió Piña al presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República, éste sostuvo que analizará si actúa de forma legal o con sus reservas a los infundios que según él le intimidó la ministra de la Corte.
