El líder moral de Movimiento Ciudadano (MC), Dante Delgado Rannauro, político de larga trayectoria, -esa rara especie parlamentaria ya en vías de extinción, de conocimientos profundos de la realidad de México- está convertido en el fiel de la balanza del Congreso de la Unión, el que hace morder el polvo a sus correligionarios de Morena y al propio Jefe del Ejecutivo federal.
Por ello, ayer en el Senado de la República, su llamado a tiempo al denominado Bloque Opositor en la Comisión Permanente, integrado por el PRI, PAN, PRD y el propio Movimiento Ciudadano, mantuvo su postura de rechazar una vez más a convocar a un periodo extraordinario, para discutir las leyes de revocación de mandato, juicio político y la orgánica de la Marina Armada.
La estrategia del líder de MC quedó de manifiesto porque en el cabildeo previo a la sesión extraordinaria, el veracruzano se reunió con sus legisladores y platicó con los otros integrantes del bloque, que salió victorioso ante el revés inflingido otra vez al presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara Alta, Ricardo Monreal.
De ahí que Delgado Rannauro, tras el resultado de esa sesión, con irrefutables análisis de hombre experto y cabal, reconocido por propios y extraños por la contundencia de los mismos, es el hombre a vencer por las huestes morenas, si éstos persisten en mantener el poder transexenal con alguno de sus decenas de candidatos, “destapados” por el propio AMLO y darle así continuidad a la gestión obradorista.
El Bloque Opositor expuso en el inicio de la sesión que su propuesta establece que la revocación de mandato es un derecho de la ciudadanía, no una petición del titular del Ejecutivo, por lo que ésta es convocada por el Instituto Nacional Electoral (INE), y no por el Congreso de la Unión, a solicitud de por lo menos el 3 por ciento del listado nominal de cuando menos 17 entidades federativas.
También Dante Delgado informó que solicitó a la Mesa Directiva de la Comisión Permanente que dicha iniciativa se integre en el dictamen de las comisiones que sesionarán el lunes próximo.
El legislador subrayó que Movimiento Ciudadano avala, dentro de la democracia participativa, la revocación de mandato como un instrumento de la ciudadanía para revocar el mandato al titular del Poder Ejecutivo, cuando se den varios supuestos que, mencionó, se presentan en la iniciativa que hoy anuncian, además de que deben cumplir ciertos supuestos que deben ser avalados por la mayoría de las y los mexicanos.
Algunos puntos de la iniciativa presentada por el grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano son: en el supuesto en que el cómputo, la diferencia entre el “Sí” y “No” es igual o menor a un punto porcentual, se realice el recuento de votos en la totalidad de las casillas.
La revocación de mandato será solicitada en una sola ocasión y durante los tres meses posteriores a la conclusión del tercer año del periodo constitucional.
El también coordinador del grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano, presentó la iniciativa de Ley Federal de Revocación de Mandato y propuso una nueva pregunta para el ejercicio que se celebrará el año próximo, en el 2022.
Dicha propuesta se suma a las del coordinador de Morena, Ricardo Monreal; a la del panista Damián Zepeda y a la de la priista, Claudia Ruiz Massieu.
La redacción de la pregunta que habrá de someterse a consulta deberá ser: “¿Está usted de acuerdo con revocar el mandato al Presidente de la Republica para que sea destituido del cargo?” con las opciones de respuesta “Sí” o “No”.
Notas de Trascendencia
Luego de conducirse con torpeza, sin medir las consecuencias de sus dichos, el titular de la Secretaría de Marina, Rafael Ojeda, tuvo que echar marcha atrás a las descalificaciones que lanzó en la Mañanera de Palacio Nacional el 21 de mayo pasado, en la que consideró que en algunos casos, el gobierno tiene un enemigo en el Poder Judicial.
En una falta de congruencia en la utilización del idioma, el almirante Rafael Ojeda expuso: “Quiero pedir una disculpa pública a quien se lo merezca, porque hay buenos jueces”
Y fue más allá, “por eso me atrevo a pedir, repito, una disculpa pública a quien se lo merezca, porque creo que es necesario para que nos entendamos”.
Agregó a su dicho: “creo que es necesario que a través de esta plática, logremos entendernos mutuamente y sobre todo, logremos aterrizar lo que andamos buscando, que es la justicia para todos nuestros conciudadanos”, aseveró frente a Arturo Zaldívar, presidente de la Suprema Corte y Consejo de la Judicatura Federal.
Ya encarrerado el comandante naval arguyó, “tenemos que cerrar bien el círculo porque si no se nos van (los delincuentes). Hay muchos casos que hasta pena nos dan que actúen de esa manera, parece ser que el enemigo lo tenemos en el Poder Judicial y tenemos que cerrar bien ese círculo para poder llevar a cabo la detención”.
Empero, ya se arrepintió Rafael Ojeda. Después de casi tres meses de haberse pronunciado contra integrantes del Poder Judicial, quizá en lucimiento con su jefe máximo, el castrense reculó. Para bien o para mal, limpió su imagen, algo nunca visto en navales. Menos en el titular de la Secretaría de Marina.
Marco Antonio García Granados