1.- Identifique de manera muy clara cuáles son sus ingresos, sus gastos y sus deudas de manera quincenal o mensual. Busque limitarse mensualmente y platicar este tema en familia.
2.- Haga planes familiares de bajo costo, actividades recreativas donde no desembolse efectivo o aproveche promociones de diversión en grupo. Cuidado con el consumo en restaurantes.
3.- Deje las tarjetas de crédito en casa y lleve con usted el dinero necesario para los gastos. No caiga en compras y lujos innecesarios.
4.- Fíjese una meta para ahorrar en cada pago o gasto que realice, además de ser posible destine un 20% de su salario a una cuenta de ahorro.
5.- En las tiendas y supermercados suelen tentarnos con muchas promociones. Cuide y revise que realmente sea una oferta y no un gancho o engaño.
6.- Platiquen y ofrezcan recomendaciones sencillas para ahorrar en familia en las cuentas de servicios básicos. Limita los gastos de tu hogar y recorte los gastos innecesarios en su familia.
7.- Ponga un límite al consumo mensual de aquello que no es un gasto básico como el uso del celular, compra de ropa de moda, televisión de paga, internet ilimitado, etc.
8.- Si consigue aumento de sueldo, siga viviendo con el mismo salario de antes. Normalmente cuando se aumentan las percepciones se incrementan los gastos y los lujos. Modérese.
9.- Evite los gastos hormiga como revistas para matar el tiempo, autolavados, estacionamientos públicos, compras en cruceros, gastos en cigarros, golosinas, etc.
10.- Es recomendable que los días que tengas más tiempo utilices el transporte público o un auto colectivo con compañeros de trabajo para ahorrar combustible y dinero.
11.- Tenga en cuenta que el despido es un riesgo latente, así que siempre tenga un colchón financiero disponible.
