La mejor organización no asegura buenos resultados. Para cumplir los acuerdos negociados en Washington, López Obrador cambió la estrategia para encarar el primer corte de caja; el canciller Ebrard es el responsable de una comisión especial que deberá contener y reducir los flujos migratorios en la frontera sur. Es decir, cualquier incidente, error, traspié o desatino en la entrega de resultados será cargado a la cuenta del titular de Relaciones Exteriores.
No sorprende que días después del anuncio rodara la cabeza de Tonatiuh Guillén, titular del Instituto Nacional de Migración, epicentro de la discordia en la relación bilateral. No llamará tampoco la atención que Sánchez Cordero regrese a su curul desde donde podrá sumar más que su paso por Gobernación, desde donde desconocen por dónde cruzaron la frontera sur más de 140 mil personas. A saber.
En medio de los cambios Ricardo Monreal deberá sacar a relucir sus dotes negociadoras para el regreso de doña Olga al Senado, ya que ha trascendido que su suplente, Laura María de Jesús Rodríguez, mejor conocida como “Jesusa”, está poniendo resistencia y ese detallito los retrasa.
Aunado a estas minucias morenas no queda claro el resultado en la operatividad de la (virtual) Guardia Nacional en su despliegue al sur del país, donde hay un serio problema de logísitica e infraestructura para albergar los 6 mil elementos prometidos al sr. Trump. Sin mencionar los costos para tal despliegue y la borrosa cadena de mando civil-militar entre la comisión de Ebrard y la 36 Zona Militar con sede en Tapachula, Chiapas.
Mientras el gobierno mexicano hace enormes esfuerzos moviendo funcionarios para demostrarle a un gobierno extranjero que hace la tarea, sin perder la dignidad claro, México debe prepararse ya para la llegada, según informó Alejandro Encinas, de 50 mil migrantes. ¿Qué puede salir mal?
Por la mirilla
La crisis de inseguridad que azota a CdMx desencadenó que Claudia Sheinbaum designara a un profesional como Omar García Harfush como titular de la PDI dejando de lado el mezquino cálculo político para construir acciones en materia de seguridad. Un paso importante, de los muchos cambios que deberá hacer la jefa de Gobierno para reestructurar el actual paradigma. Enhorabuena.
@GomezZalce