El gran partido entre Santos y Cruz Azul nos dejó muchas reflexiones y emociones.
Me dio gusto que, a nivel nacional, se le dio al Santos su justa dimensión respecto a lo hecho y logrado por méritos futbolísticos.
La prensa ha alabado el buen juego del Santos, a sus canteranos y a Ignacio Ambriz.
Todo eso por encima de los defectos que Cruz Azul tuvo en el partido. Muy bien, de eso se trata: honor a quien honor merece.
Hay una idea sustancial que imperó hasta antes de que se jugara el partido: El Santos llegaba como víctima perfecta para un Cruz Azul que haría de verdugo, de ejecutor.
Pero el ejecutado terminó siendo el Cruz Azul, que pagó caro sus fallas y el haber perdonado al Santos durante el primer tiempo.
Eso lo terminó penalizando con el gol de Santos casi al final de los primeros 45 y, como consecuencia, una goleada definitiva.
Cuatro nombres destacan por parte del Santos: Medina, Carrillo y Muñoz. Junto con Acevedo, que atajó un penal que, de haberlo concretado Cruz Azul, probablemente la historia habría sido distinta.
Pero los tres primeros futbolistas destacaron de manera excepcional; con descaro, atrevimiento, desparpajo y calidad.
La técnica que tienen tanto Medina como Carrillo es poco usual.
El Santos tiene un futuro espléndido si decide mantener a estos futbolistas en sus filas.
Lo de Santiago Muñoz también merece mención, pues es muy, pero muy de casa, es guerrero y emana calidad en ofensiva.
El gol que anota al final, el tercero del Santos, es de una calidad muy significativa.
Pero hay más factores para destacar: el Santos lleva 3 victorias al hilo e, increíblemente, sin recibir gol.
Dória ha vuelto a ser aquel Dória confiable en el que todos creíamos, ese defensor que siempre lega a tiempo y destaca por su ubicación, por saberse anticipar a las jugadas del rival; sabe leer muy bien los tiempos antes de que el rival ejecute.
Ese es el Dória que llegó a estar en un grandísimo nivel con el Santos.
Pero no solamente él, sino toda la línea defensiva. Ahora sí podemos decir que se nota la mano de Ignacio Ambriz. En los pocos partidos que lleva dirigiendo, ya hizo más que Repetto en un montón de encuentros.
El Santos ya tiene orden, ya defiende bien, es contundente y ha ganado circuito y conexión entre líneas.
Toca visitar a Tijuana… que no juega mejor que el Santos y, después, a llenar otra vez el Corona porque viene el América.
¡Cuidado con el Santos!
