El América lo ha vuelto a hacer. Son ya tres torneos consecutivos en los que levantan el título.
Un tricampeonato fantástico, urdido por un André Jardine que tomó al club cuando nadie, pero nadie, quería dirigirlo.
Él salió al quite y configuró una dinastía de futbolistas que quién sabe cuándo vuelva a repetirse.
Hemos podido ver, desde la llegada del brasileño al banquillo, uno de los mejores América de la historia. Los jóvenes de estos tiempos podrán contarle a sus hijos y nietos que pudieron ver a este América tricampeón.
Ya no se quedarán solamente con lo que les cuentan sus padres o abuelos sobre aquel América de los años ochenta, pues lo jóvenes de hoy ya vieron, también, a un gran América y tienen algo qué contar para el futuro.
Ya nadie les platicará de aquellas épocas para impresionarlos.
Hacía tiempo que el América no se veía tan sólido, pero no sólo eso, sino que se nota una generación de futbolistas comprometida con el club y con el proyecto.
Todos derrochan talento y saben a lo que juegan. Por primera vez en mucho tiempo podemos hablar de un modelo de juego americanista que gusta y enorgullece.
Podemos hablar de una mística en su juego, liderados por futbolistas de mucho carácter y que sin lugar a dudas están para refrendar el título en el próximo torneo...sí ¿por qué no? Obviamente es, junto con Tigres y Monterrey, uno de los clubes con mejor plantel.
América bien puede armar dos equipos titulares con el exquisito plantel que tiene.
Pero para eso se necesita también tener la gracia del futbol, del buen futbol y ser tocados por la mano divina, porque tanto como Monterrey y Tigres, al igual que las Águilas, están obligadísimos a ser campeones en cada torneo, por las grandes inversiones que torneo a torneo realizan en cuanto a fichajes.
Pues bien, los equipos regios son (sobre todo Monterrey) el claro ejemplo de que ni con todo dinero se puede alcanzar la gloria. El América sí lo logró.
Sobran las palabras para describir lo que ha logrado este América, el más grande del futbol mexicano y, al mismo tiempo, el más popular.
El América tiene algo de ese genoma del Real Madrid: nunca se rinde y lucha hasta el final.
Felicidades por el tricampeonato. Mi más sentido pésame a los regiomontanos.
