La lectura oxigena la conciencia.
En esta época tan compleja, donde hasta los bancos están en fases irregulares con posibilidad de quiebra, tenemos problemas y pronósticos malos para la provisión de agua en abril y hay inseguridad; además de un Congreso complicado en su interpretación jurídica, en sus funciones y en sus relaciones fundamentales con el Gobierno, y en fin, inflación, mayor pobreza y todo lo que los lectores ya saben.
Por eso, que la UANL organice una Feria del Libro, con invitación especial de la Universidad de Salamanca, una de las instituciones educativas más antiguas en el mundo y gestora y representante mundial del idioma español, a través de Miguel de Cervantes Saavedra, representa un alivio, porque leer es fortalecer la conciencia a través de las experiencias de otros personajes que con novelas, ensayos y poesías tocan las fibras sensibles del espíritu y alivian la problemática material que está destrozando nuestra cultura.
Ayer se inauguró y por supuesto que el rector Santos Guzmán y su secretario de Cultura organizaron este evento, acompañados de la estructura universitaria y esperamos que en el transcurso de los días los universitarios, fundamentalmente y toda la base crítica que tiene entre sus costumbres la lectura, continúe asistiendo.
De esta manera se enriquece lo que está ligado a la esencia misma de la Universidad, que es el saber y el transmitir el conocimiento y así lograr la formación integral con investigación, proyección social y sobre todo con énfasis en la generación y almacenamiento de la cultura.
Todo esto se da a través de la lectura que, si bien en nuestro país no es la óptima, aquí en Nuevo León las instituciones educativas siempre la han fomentado y la resultante de este esfuerzo por parte del Colegio Civil, la pieza más antigua del recuerdo histórico de la cultura de Nuevo León está vigente y ahora se enriquece la Feria con invitados especiales de otras partes.
Descartes: Pienso, luego existo… Felicito al rector y a las autoridades universitarias por este esfuerzo de recuperar la conciencia y el placer del saber, en esta época difícil que vive el mundo en la actualidad, por su concepción materialista y su olvido del espíritu del arte literario y la cultura integral.
