Mucho, pero mucho tendrá que pensar el alcalde de Torreón, Román Alberto Cepeda González, acerca de la interpretación que hace de asuntos públicos inscritos en la incesante dinámica social del municipio.
Después de razonar, seguiría plantear una mejor formar de responder a la prensa y a la opinión pública.
Román Alberto encabeza el cabildo y debe ser el primer garante, por ejemplo, del tema de la seguridad.
Solo que sus declaraciones rayan al filo de la intolerancia, y si me voy más pa’lante, son un velado autoritarismo que podría ser represivo. ¿Es de piel muy sensible y por ello se exalta?
Calma, calma chicha alcalde.
Mira (de tú): de los señalamientos en redes y en medios de comunicación de presuntos abusos policíacos y de agentes de vialidad, revísalas sin descartarlas.
Si son ciertas, actúa, estás a tiempo de dar un manotazo en tu escritorio y llamar a cuentas a tus colaboradores, convoca a rueda de prensa y presume lo que harás para corregir ese problema.
Si no son ciertas, igual, informa y evita que se dañe tu imagen y la de ambas corporaciones
Si la Ibero propone que los cristales polarizados en vehículos que circulan en Torreón exige un enfoque desde la salud, nutre tu temperamento de las opiniones de quienes sí saben y despeja las dudas. Invita a las autoridades de esa institución universitaria y responsablemente –las dos partes- informen a la ciudadanía.
Que si se rayaron o vandalizaron cinco (de 56) copias de las fotografías de pinturas de la exposición El Museo del Prado en Torreón (Plazuela Juárez de la Plaza Mayor), valora si la libertad de expresión debe reprimirse investigando –con todos los medios a tu alcance- a quienes acometieron esa acción.
Tu capital político acreciéntalo, elévalo, sé empático con la raza. ¿Por qué no abres tu agenda a un diálogo con toda esa gente? Escúchala, convive, abrázala, camina lo que caminan, recórrela, si quieres acompañado por coequiperos de tu confianza, pero presta oídos.
¿Crees que no hay dolor, coraje e impotencia entre la población? ¿Crees que en verdad no hay razón en sus quejas? ¿Piensas que no hay familias destrozadas por las numerosas desapariciones forzadas que las aquejan? ¿Crees que las mujeres en Torreón se sienten seguras y libres? ¿Crees que no duele ver en numerosos cruceros a niños y jóvenes haciendo malabares –literal- en esta vida por sus vidas?
¿Piensas que todos esos seres humanos no tienen derecho a quejarse, denunciar, rayar, mentar madres y hasta insultar a la autoridad para desahogar sus pesares? ¿Dónde quedaron la alianza interpartidista y sus marchistas en defensa del INE el día 8M?
Parece una obviedad lo que propongo, y quizá todo eso y más lo sabes, pero de que es el verdadero palpitar de Torreón y su gente es un hecho.
La violación de derechos humanos está en todo lo alto.
La vigilancia con sofisticadas cámaras de reconocimiento facial en algunas calles y edificios públicos invaden el derecho a salvaguardar la identidad que tenemos, todos, como ciudadanos.
Te saludo con respeto, alcalde.
