Política

330 inscritos, buen número

  • Columna de Juan Noé Fernández Andrade
  • 330 inscritos, buen número
  • Juan Noé Fernández Andrade

El tema da para más y es parte de la formulación de ideas o hipótesis sobre el asunto. 

Desde chamaco escuché y he leído que en nuestro querido país, además de otros déficits de índole humanista, arrastramos el de no leer, a la mayoría de las niñas y niños no se les inculca ese hábito casi en ningún lado. 

Por eso, en promedio, apenas leemos seis libros al año. Y por eso, también, vivimos como vivimos y hacemos lo que hacemos.

Justo este fin de semana, viernes y sábado -y se prolongará hasta su premiación el 30 de abril Día del Niño (a)-, empezó en Torreón la fase eliminatoria del primer Concurso Municipal Infantil de Lectoescritura. 

Es un intento formal de promover la lectura, de voltear a ver a la niñez, de abrazarla y participarla de lo que libros en sus edades tempranas, que sea protagonista de veras de una política pública que aspira, por qué no, a que esas futuras generaciones sean mejores personas, mejores ciudadanos. 

Una meta por alcanzar en estos tiempos de, parece, lo trascendente es lo urgente, lo rápido, lo urgente y las vaguedades. 

Según datos, en Torreón son alrededor de 135 mil educandos en los niveles de educación primaria y secundaria, y hay un maestro por cada 25 de esos alumnos. 

Lastimosamente rondan en 15 mil los niños que no acuden a ninguna escuela por diversas causas.

Un exceso de discriminación podría estar caracterizando esta etapa en la ciudad, pero que en definitiva por nada se justifica.

Cerrar filas en torno a la niñez, estar con ella, escucharla, atenderla, proporcionarle lo debido para que coadyuvar en su formación humana y que su tránsito hacia la edad adulta devenga en bienestar integral, es una tarea pendiente. 

A las niñas y los niños hay que procurarles su alma, su corazón.

El certamen de lectoescritura lo organiza la Coordinación de Bibliotecas Públicas Municipales y lleva esa intención, por eso convocó y, al menos en esta oportunidad, participan 330 infantes. Yo no sé qué represente esta cifra, cómo se interpretaría. 

Pero saber que hay 330 niñas y niños que se inscribieron, que están leyendo y preparándose porque es un llamado a su interés habla bien de ellos, de sus padres y sus maestras (os). La lectura que hará cada uno, así como la escritura de lo que reflexionen, augura algo positivo. 

Me conmovió conocer en agosto pasado a una pequeña de nueve años que casi a diario entra directo a la sala infantil de literatura en la biblioteca de la Alameda Zaragoza a leer mientras su mamá vende gorditas ahí afuera. 

Y la veo concentrada en los minutos que sostiene un libro abierto entre sus manos y lee y en su pensamiento ha de ver otros mundos, otras vidas. 

Su imaginación se ha enriquecido.

Ojalá que este evento lleve a las y los 330 participantes un mensaje inspirador, los haga huir del tedio y de la monotonía de perder -sin que lo sepan- su precioso tiempo y que descubran lo que el contenido de los libros es capaz de hacerles sentir.

Así, pues, este comentario hoy. Que la lectura se convierta en el alimento de nuestra niñez lagunera, un nutriente imprescindible en nuestra dieta del alma.

Obvio, con el deseo de que, así como aparecen tiendas de (in)conveniencia, bares, expendios, lotes de autos y todo mundo en Torreón vende comida y hay un consumismo exacerbado, también se instalen librerías, haya ferias de libros nuevos o usados y las bibliotecas funcionen y cumplan su responsabilidad. 

Solo entonces subiremos “a otro nivel”.

Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.