Política

El capitalismo y su problema existencial parte III

  • Columna de Juan María Naveja Diebold
  • El capitalismo y su problema existencial parte III
  • Juan María Naveja Diebold

Cerramos 2018 en esta columna concluyendo que la humanidad enfrenta un problema existencial al haber resuelto sus mayores problemas de supervivencia: ya no hay hambre, guerra o epidemias. De eso revelamos que, enfrentando vidas más largas y seguras, las personas hemos dejado de hablar con “dios”; no Dios Padre judeocristiano (y musulmán), dios universal con el que todos tenemos un monólogo. Además, los roles de familia y género han cambiado drásticamente, de tal manera que el procrear y continuar una tradición ya no son vistos como la misión central en la vida de una persona ¿Qué más deparará el siglo XXI para la humanidad?

Antes de empezar con más pronósticos, hablemos de una adicción que nos ha contagiado a todos en el mundo; la gratificación instantánea. El “no puedo esperar a que salga el nuevo episodio de mi programa de televisión” ha tomado todo otro significado. Todas nuestras interacciones en el siglo XXI están diseñadas para estimular nuestro cerebro constantemente, es un hambre insaciable de recibir pequeños premios neuronales.

Los mejores ejemplos están en nuestros celulares. Redes sociales, estar constantemente refrescando Instagram para ver en ese preciso momento qué están haciendo los demás, jalar para abajo Twitter para recibir nueva información de mis intereses. Apps de noticias; necesito saber lo que sucedió en deportes, farándula, política y demás en el instante que suceden. Juegos; no puedo estar ni cinco minutos sin tener algo qué hacer, necesito mantener mis manos ocupadas en algo, como si se fueran a entumir sin actividad continua y por supuesto que no es por mantenerme ocupado es la necesidad de foquitos y ruiditos que están mandando señales a mis neuronas. Servicios de mensajería, como TXTs y WhatsApp; instantáneo. Email; instantáneo. El clima; instantáneo. Compras; instantáneo. Comida a domicilio; instantánea. Transporte; instantáneo. Video; instantáneo.

No estoy describiendo el pésame de haber perdido el gusto por la música clásica, la prosa en forma larga y la correspondencia escrita a mano; les estoy tratando de decir que hemos atrofiado nuestros cerebros, incluso los más tecnófobos entre nosotros. Nuestros cerebros ya no soportan la aburrición y siendo sinceros, aunque quisiéramos pretender que esto nos ha hecho ocuparnos de perseguir vocaciones merecedoras y productivas, la mayoría del tiempo lo consumimos tragando series de Netflix como si fueran palomitas, tras nuevos récords en Candy Crush y haciendo todo lo posible por no perdernos nada de lo que puedan estar haciendo los demás; aunque solo lo vivamos a través de una pantalla.

El daño es fácil de percibir en todos nosotros. El sentimiento de vacío que sentimos cuando dejan de llegar los estímulos y la cada vez más alta barda que tienen que subir para interesarnos. Para algunos hasta se profundiza en ansiedad y depresión, pero a todos nos afecta. Ni las películas ni las series se han hecho peores, solo nos hemos acostumbrado a tener una infinita oferta y variedad. La tecnología no ha hecho más fácil mantenernos en contacto, lo ha hecho más difícil. No, el internet no lo sabe todo y la mayoría de lo que contiene está equivocado, pero nos tenemos que desconectar para darnos cuenta de eso.

Google news logo
Síguenos en
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.