Siempre es atractivo ir a un mundial y más cuando la costumbre ha sido así. La asiduidad de estar presente nos impulsa a suponer que en esta ocasión así sucederá.
Ya se hizo costumbre batallar cada cuatro años para ver claro el panorama. En Jamaica se aligeraron las complicaciones gracias a la paciencia de todos los actores.
Al lado del triunfo, que era obligatorio, debemos destacar el esmero que pusieron para obtener los tres puntos.
Solos complicaron el partido, solos, porque haber estado con un jugador de más, les sirvió, pero estuvieron gran parte del juego abajo en el marcador.
De estar perdiendo, le dieron la vuelta, y ahí radica el mérito, haya sido como haya sido.
Pero ver a este equipo en Qatar, el mismo que estuvo en Jamaica, da miedo porque las condiciones no se repetirán tan fácilmente.
Se abre otra vez la duda, se repite la misma pregunta de cada cuatro años. ¿Estar en el próximo mundial es caer en el mismo sitio?
Se supone que existe un aliento que inspira hoy para ver a México jugando la competencia más importante pero también la más desordenada, porque por primera vez en la historia se jugará en tiempo (calendario) no usual.
Martino y sus colaboradores podrán estar tranquilos por el triunfo en Jamaica pero al mismo tiempo deberán preocuparse porque este equipo alcanza para poco.
Podrán suponer que así ha sido cada cuatro años, que es mucho el gozo y la ilusión de viajar lejos, llegar, posar para la historia, poner la imagen del país en el lugar de costumbre pero no esperar algo tan diferente.
Es el espejo normal después de ver cómo se sufrió para vencer a los dueños del estadio vacío. La victoria preocupa casi igual que si hubiera sido una derrota, aunque parezca raro.
El panorama se abrió pero el futbol no garantiza otro tipo de boleto, un mejor lugar en el mundial.
Para eso, no necesitamos naturalizados ni cuerpo técnico extranjero completo. Son muchos los que dirigen para obtener idéntica posición.
Los jugadores, con talento y paciencia, pusieron su esfuerzo a favor del triunfo que se veía desde antes de viajar. Es lo único rescatable, los tres puntos, y no perder su lugar en la tabla.
De pasada aseguraron el interés de hacer el gran viaje lejano donde las condiciones podrán demandar mejores conductas.
Festejar hoy es válido porque el triunfo se acompaña con sonrisas.
Mientras se abre la misma duda. ¿México va a estar en Qatar? Ya estando allá… ¿El quinto partido llegará?
