Después de permanecer 47 años en el encierro, un prominente asesino serial británico tiene grandes posibilidades de caminar por los lugares que se le antojen, una vez que quede libre, lo que puede suceder en las próximas festividades navideñas, en caso de que las autoridades le concedan la libertad bajo palabra.
En 1973, Patrick Mackay —de 22 años— y un grupo de amigos visitaron Kent, uno de los 47 condados del Reino Unido. Después de beber y drogarse en el lugar, Mackay trabó amistad con el “Padre Crean”.
Tras la juerga de fin de semana, los amigos regresaron a Londres. Mackay decidió quedarse unos días más en compañía del religioso. La camaradería terminó cuando Mackay sustrajo un cheque por £30 libras de la residencia Crean, por lo que fue arrestado por unos días.
Al retornar a Londres, Mackay recibió las burlas de sus amigos, quienes insinuaban que su amistad con el cura era en realidad un encuentro homosexual. Mackay enfureció, y para demostrar a sus compañeros que él era hombre, regresó a Kent en busca del clérigo.
El religioso caminaba por el jardín de su casa cuando apareció Mackay. El cura fue asesinado de varios hachazos, uno de ellos le partió el cráneo. Su agonía de más de una hora fue observada con atención morbosa por el agresor.
La huida de Mackay fue todo menos sigilosa. Fue visto por varios de los vecinos de Crean, quienes lo señalaron ante las autoridades. Pese a todo, la detención del sospechoso tardó algunos años.
En las investigaciones posteriores a su arresto, al menos 13 homicidios ocurridos entre1973 y 1975 —la mayoría de ellos de ancianas apuñaladas o estranguladas— apuntaban hacia Mackay, quien terminó confesando su participación en once casos.
La noticia de la posible liberación de Patrick Mackay ha creado indignación entre familiares de las víctimas y entre algunos de los residentes de Kent y Londres.
El Discípulo del Diablo, como se le conoce al asesino, es el preso con más años de encierro (47) en el Reino Unido. Pese a esa circunstancia, los afectados tenían toda la esperanza de que Mackay muriera en prisión.
Todo apunta a que no será así, y que para la próxima Navidad Patrick Mackay andará de compras en los centros comerciales de su preferencia.
José Luis Durán King
