Las mujeres migrantes que pasan por Puebla con el objetivo de llegar a Estados Unidos se encuentran dentro del grupo que más violaciones a sus derechos están sufriendo y que más dificultades enfrentan en su camino.
La Clínica Jurídica del Instituto para las Mujeres en Migración (IMUMI) reveló, en su momento, que México es visto como un país de retorno y de asilo a mujeres migrantes; sin embargo, es un espacio donde se comenten agresiones.
Las niñas y mujeres sufren una violencia exacerbada, ya sea física o sexual, situación que es un factor decisivo para que busquen mejores condiciones de vida en otro país. Además, se nota la falta de atención específica en higiene y salud para las mujeres y sus hijos, como consultas de ginecología, reveló el IMUMI.
Desde hace casi 30 años, el Centro de Estudios de Género de la Facultad de Filosofía y Letras (FFyL) de la Benemérita Universidad autónoma de Puebla (BUAP) analiza la situación de las mujeres refugiadas en el estado, así como su interseccionalidad, sus derechos humanos, los retos y oportunidades para su integración.
Como parte de los estudios, desde el año 2016 existe una línea de investigación entre la BUAP y la Universidad Complutense de Madrid, en la que se analiza las violaciones a los derechos que sufren las mujeres migrantes.
Como parte de los estudios, se detectó que las mujeres en movilidad se enfrentan a violencia, la cual, es cometida por parte de grupos delictivos, así como por integrantes de la sociedad civil y de las autoridades.
Las investigadoras e investigadores tanto de la BUAP como de la universidad madrileña, están trabajando en el desarrollo de propuestas a favor de mujeres refugiadas y en tránsito, a la par de crear redes de apoyo.
Los estudios revelan problemáticas, retos y la necesidad de protección internacional de las mujeres en tránsito hacia Estados Unidos, entre ellas, las que salieron de países centroamericanos, de Sudamérica y hasta de otros continentes como Asia y África.
En la actualidad, es necesario un espacio de diálogo para reflexionar sobre las problemáticas que involucran a las mujeres y tienen un impacto local, para proponer soluciones en donde esté involucrado el sector gubernamental.
Sin duda, es fundamental que se implementen acciones encaminadas a minimizar el riesgo de mujeres y niñas en situación de migración y que se impulse políticas migratorias y programas en su beneficio.