La modificación de nuestras rutinas y el confinamiento prolongado condiciona una sensación de cansancio crónico. El ejercicio y el dormir bien no me descansan lo suficiente, ¿qué puedo hacer doctor? No es tan sencillo el identificar la causa de este padecimiento, la fatiga crónica es un trastorno complejo caracterizado por fatiga extrema que no puede atribuirse a ninguna enfermedad preexistente. La fatiga puede empeorar con la actividad física o mental, pero no mejora con el descanso. La causa del síndrome de fatiga crónica es desconocida, aunque existen muchas teorías, que van de las infecciones virales al estrés psicológico. Algunos expertos creen que el síndrome de fatiga crónica puede desencadenarse por una combinación de factores.
No hay pruebas específicas para confirmar el diagnóstico. En algunos casos es necesario hacer varios estudios y exámenes médicos para descartar otros problemas de salud que tienen síntomas similares. El tratamiento del cansancio o fatiga crónica se centra en buscar el alivio de los síntomas.
Los signos y síntomas frecuentes son: agotamiento o fatiga prolongada después de hacer ejercicio físico o mental, pérdida de memoria o concentración, dolor de garganta, dolor articular o muscular sin causa aparente, dolores de cabeza entre otros. Es importante consultar oportunamente al médico debido a que la fatiga puede ser síntoma de otras enfermedades, como infecciones o trastornos psicológicos.
Aún se desconoce el motivo por el cual algunas personas son más propensas que otras a padecer este trastorno. Es posible que exista una predisposición genética para padecerlo, manifestándose por la combinación de factores. Entre los factores posibles desencadenantes están algunas infecciones virales comunes, alteraciones del sistema inmunitario, desequilibrio hormonal, pero todavía no se demuestra la influencia de estas anormalidades.
La fatiga crónica puede ocurrir a cualquier edad, pero afecta con más frecuencia a personas de entre 40 y 50 años. Es más frecuente en las mujeres que en los hombres, pero quizás esto se deba simplemente a que las mujeres acuden más oportunamente a un médico. La incapacidad de manejar el estrés es el factor más asociado a la fatiga crónica.
Los investigadores han evaluado la efectividad de diversos productos naturales para tratar la fatiga crónica encontrando efectos beneficios con algunos, sin embargo, muchos de estos prometedores tratamientos no fueron confirmados por estudios científicos confiables.
Tratar la fatiga crónica puede ser difícil. Hay mucha publicidad sobre varios tratamientos y enfoques naturales, así como otros suplementos alimentarios. Consulta con tu médico antes de probar algo. Algunos productos herbales pueden interactuar con medicamentos prescito para controlar enfermedades concomitantes o pueden tener otros efectos secundarios que te pueden ocasionar daño.
Más vale prevenir.