El bosque de Chapultepec encierra un verdadero tesoro. Sí, se trata de una veta inagotable de diamantes, que deslumbran con su fulgor. No es un tesoro escondido, oculto, sino todo lo contrario. Está a la vista de todos, para que cualquiera que lo desee pueda disfrutar a plenitud de esas joyas.
Se trata del Centro Cultural del Bosque, y de sus versátiles espacios escénicos que no dan tregua a la creatividad y en cuanto termina la temporada de una puesta, otra ya se alista para seguir deleitando al público.
Claro ejemplo de ello se vive estos días, pues si bien este domingo cierran el telón dos montajes, el lunes mismo arranca otra puesta, y así se van hilvanando una tras otra. He aquí la prueba:
Luego de tres apoteóticas temporadas, hoy se despide definitivamente de la cartelera Indecente, uno de esos montajes que se han consagrado tanto en el gusto del público, como de la prensa y la crítica, que la llenó de premios.
Escrita por Paula Vogel, Indecente recrea la historia verdadera de la controvertida obra de Sholem Asch El Dios de la venganza, y de los artistas que contra todo y contra todos la llevaron a escena en Europa y en EU.
La anécdota transcurre a lo largo de medio siglo, desde 1906 hasta finales de la década de los 50, y va contando el escándalo que provocó esta obra que gira en torno al amor que surge entre dos mujeres, y que incluía un beso lésbico en escena, lo que significó un escándalo que terminó en censura e incluso cárcel y juicios para los actores.
El montaje que ahora vemos es una suma de aciertos que bien vale la pena enlistar. Como ya lo dije el texto es estupendo, claro, emotivo, contundente. Hilvana la ficción dramática con los hechos reales, en un entramado muy bien logrado.
A esto se suma la brillante --sin exageración—dirección de escena de Cristian Magaloni, que con cada propuesta escala peldaños y es ya una de las figuras consagradas del teatro actual: ¡Bravo Cristian!
Hay que agregar un equipo creativo de primera: Emilio Zurita (escenografía e iluminación); Sara Salomón (vestuario); Miguel Jiménez (diseño sonoro y audio); Gabriela Aldaz (coreografía); Miriam Romero (videomapping); Eliseo Santillán y Fernando Canek (dirección musical); y Enrique Arce (adaptación).
Que buen trabajo de conjunto. Todo embona como un gran engranaje y convierten mágicamente el escenario en la infinidad de lugares y momentos en que sucede la acción.
Y por supuesto al elenco de experimentados actores-cantantes: Majo Pérez, Ana Guzmán Quintero, Federico Di Lorenzo, Alberto Lomnitz, Roberto Beck, y Elizabeth Guindi. Por falta de espacio no me detengo en el desempeño de cada uno de ellos. Pero bravo a todos; al igual que para los músicos: Leo Soqui, Cecilia Becerra y Rodrigo Garibay.
Indecente se presenta en el teatro Julio Castillo, y este domingo cierra definitivamente (ojalá que no) su temporada.
Ni 24 horas estará vacío este espacio, pues lunes 29 y martes 30 el aclamado coreógrafo belga Wim Vandekeybus y su compañía Última Vez regresan a México para presentar su más reciente coreografía VOID.
VOID, es una impactante obra de danza contemporánea y teatro físico que se presentará como parte de una gira internacional
Esta compañía belga llega a México gracias al trabajo de YEBERG: un nuevo impulso para la danza contemporánea en México,
fundada este mismo año por Estefanía Amador Cabiedes y Eleno Guzmán Gutiérrez con la misión de fondear, producir y promover producciones originales de danza contemporánea de corte internacional a través de MOVES México. Su objetivo es acercar al público mexicano, especialmente a niños, adolescentes y jóvenes, experiencias transformadoras que amplíen su visión del mundo y del potencial expresivo del cuerpo a través de la danza.
Las funciones se presentan en colaboración con el INBAL a través de la Coordinación Nacional de Danza y con la complicidad de la Coordinación Nacional de Teatro y como evento inaugural del Festival Internacional de Danza Contemporánea “Lila López” en San Luis Potosí, en su edición 2025.
Esta pieza, creada en colaboración con un elenco multicultural de seis bailarines provenientes de Italia, Bélgica, Hong Kong, Alemania, Suecia y Francia, invita al público a explorar los mundos interiores de personajes marginados que desafían las normas sociales.
En VOID, Vandekeybus presenta un universo donde la individualidad y la diferencia toman el centro del escenario. A través de una escenografía minimalista diseñada por el propio coreógrafo, la obra utiliza la danza contemporánea y el teatro físico para explorar la idea del vacío como un espacio lleno de posibilidades.
La interacción entre sonido y silencio, junto con la música original de Arthur Brouns, que incorpora elementos de jazz neoyorquino y composiciones de Lander Gyselinck, crea un paisaje sonoro que resalta tanto la conexión como la soledad de los personajes.
La obra no busca ser un reflejo literal de la realidad, sino una invitación a que el público conecte con su propia imaginación y reconozca la universalidad de lo anormal. Cada personaje en VOID ofrece una perspectiva única, desafiando las nociones de normalidad impuestas por la sociedad. La coreografía destaca por su intensidad y dinamismo, características distintivas del estilo de Vandekeybus.
Ambas funciones serán a las 20:30 horas.
Y a unos metros de ahí, en el teatro El granero también este domingo cierra su temporada (ojalá vuelvan pronto a cartelera) Salomé, en una puesta en escena realmente extraordinaria.
La historia bíblica de Salomé, Herodes Antipas y Juan el Bautista, dramatizada por Óscar Wilde, toma dimensiones realmente épicas en esta producción de Sempiterno Theatrum.
En esta adaptación de María Inés Pintado y Octavia Popesku, esta segunda también directora de escena, todos los personajes son interpretados por actrices, quienes dan una cátedra en el escenario con su trabajo impactante, pulcro, entregado, conmovedor...
Erika de la Llave, sin duda una de las mejores actrices de su generación, encabeza el elenco dando vida a un estupendo Herodes, autoritario y al mismo tiempo tímido y débil, presa de su lascivia, que lo lleva a su trágico final. ¡Bravo, bravo, bravo Erika¡
Junto a ellas, también estupendas María Inés Pintado, Lucía Uribe, Sonia Couoh, Sak Nikté y Elizabeth Pedroza.
Y ovación de pie para los músicos en escena Ricardo Estrada y Sebastián Betancourt, que dotan al montaje de colores y sentimientos que cautivan.
También Salomé cierra hoy temporada (insisto que ojalá sea temporal) a las 18 horas en El Galeón.
Tres diamantes que deslumbran con su luz… ya veremos qué sigue.