Espectáculos

Triunfal Algodón de azúcar

Hace menos de un mes la Academia de las Artes Escénicas de España entregó el premio Talía a la obra Algodón de azúcar como Mejor Espectáculo Latinoamericano de Artes Escénicas, lo cual ha sido un imán más que poderoso para que todas las funciones de esta puesta en escena estén agotadas.

Este éxito en taquilla se suma al que ya había tenido este montaje en sus dos temporadas anteriores, primero en Ciudad Universitaria y después en el Centro Nacional de las Artes. Un triunfo, por cierto, más que merecido, porque se trata de una puesta en escena realmente estupenda.

Escrita y dirigida por Gabriela Ochoa, Algodón de azúcar es de esas obras artísticas que al mismo tiempo fascinan y aterran. Lo primero por la brillantez de su propuesta; lo segundo por la dureza de la temática que aborda.

Empezaré por lo segundo.

El montaje, una creación de la Compañía Conejillos de Indias, aborda muy inteligentemente un problema gravísimo: el abuso sexual infantil.

Aunque por su propia naturaleza, las cifras de los casos son muy difíciles de establecer, he aquí algunos botones de muestra:

Por ejemplo, de acuerdo a datos de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) en México se cometen al menos 600 mil delitos sexuales cada año; por otro lado, un estudio dado a conocer por la otrora senadora Josefina Vázquez Mota, asegura que cada año 5.4 millones de niños, niñas y adolescentes son víctimas de abuso sexual en México. ¡aterrador!

En lo que ambos estudios coinciden es que 9 de cada 10 víctimas son mujeres y 4 de cada 10 son menores de 15 años de edad; además, la mitad de estos delitos son cometidos en el hogar y el 60% de las veces por parte de familiares o personas conocidas, hombres en casi todos los casos.

De acuerdo a la Dirección del Centro de Respuesta de Incidentes Cibernéticos de la Dirección General Científica de la Guardia Nacional, en los primeros meses de pandemia, los reportes de pornografía infantil se incrementaron en 73%.

Antes de la pandemia, México ocupaba el 1er lugar mundial en consumo de pornografía infantil (PCF, 2018), el 2do productor y distribuidor mundial y el 1ero en América Latina (ECPAT, 2019); entre los países que integran la OCDE, ocupamos 1er lugar en violencia sexual en contra de niñas, niños y adolescentes (OCDE, 2019).

¡Qué horror! y Algodón de azúcar pone el dedo en esa llaga.

Como reza la teoría, para que un tema tan fuerte como éste conecte con el público el mejor camino es la comedia. En medio de las risas, que son muchas al principio, se van soltando pequeños indicios de lo que vendrá después.

La anécdota es aparentemente simple: Un hombre adulto sale a comprar un pastel, en el camino se pierde y va a dar a un parque infantil, ahí se encuentra con tres payasos con los que recuerda-escenifica diversos momentos de su niñez, lo que lo lleva a “descubrir” un suceso que tenía olvidado, y que ha marcado su vida.

Algodón de azúcar es un estupendo montaje no sólo por su temática social, sino por sus valores de producción escénica que hay que aplaudir: dramaturgia y dirección (Gabriela Ochoa), escenografía (Félix Arroyo), iluminación (Ángel Ancona), vestuario (Giselle Sandiel), escenofonía (Genaro Ochoa), maquillaje (Maricela Estrada), y máscaras (Felipe Lara).

Y por supuesto al estupendo elenco: Alejandro Morales, Romina Coccio, Carolina Garibay, Miguel Romero, Francisco Mena, Paco Castañeda y Misha Marks. ¡Bravo a todos! ¡gran, gran trabajo!

Algodón de azúcar se presenta ahora los lunes y martes, hasta el 11 de junio, en el teatro El galeón Abraham Oceransky, atrás del Auditorio Nacional.

Google news logo
Síguenos en
Hugo Hernández
  • Hugo Hernández
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.