La Liga de Futbol Americano de México (FAM) sigue dando buenas noticias, justo la semana pasada se anunció que la organización consiguió el patrocinio de la empresa YOX, fortaleciéndose de frente a la temporada 2022.
Y sigue, el miércoles pasado la Liga y el equipo Caudillos de Chihuahua recibieron de forma presencial la visita del ex esquinero estrella de Acereros y luego campeón con Baltimore, Rod Woodson, quien sostuvo una charla motivacional con entrenadores, directivos y jugadores con respecto a este deporte. Fuera del evento, llamó la atención que Woodson dijera que va a mantener una relación estrecha, tanto con Caudillos como con la Liga FAM. Sin duda una muy buena noticia que habla de que se están haciendo bien las cosas en México y se está llamando la atención de personalidades del deporte a nivel mundial, seguro veremos más oportunidades como esta.
Un comentario por demás inspirador de Woodson fue que espera ver que la FAM empiece a proveer jugadores a la NFL en un plazo máximo de 10 años ¡Que así sea! No podemos más que esperar grandes cosas de la campaña 2022 de la FAM, a la cual estaremos apoyando, con mucho gusto, desde esta trinchera.
Por otro lado, tenemos la conclusión, al menos de forma temporal, de la incógnita sobre el destino del gran Aaron Rodgers, que se arregló de forma por demás bipolar. Rodgers aceptó jugar un año más con los Packers, en lo que llamo como relación “bipolar”, porque el número 12 declaró cosas bastante ácidas en contra de la directiva de su equipo, lo cual tal vez sea justo, pero no necesario y, aunque lo que él pretendía era defender a sus compañeros, yo creo que no es el momento de crear ni externar controversias, lo que debe de hacer es meterse de lleno al campo y ser un deportista profesional de frente a una temporada de la NFL.
Rodgers dejó en claro que le están pagando muy bien, y eso debería recordarle que, al final, él es un empleado, y si no está de acuerdo con la forma en las que los empresarios llevan sus negocios, es decir, sus patrones, tal vez debería ser él quien se deba ir a otro lugar, tal como hizo Tom Brady, quien hasta la fecha no ha despotricado en contra de los Pats, aun cuando se sabía distanciado de Belichick; se fue en paz a un equipo nuevo, con una mentalidad nueva, terminando con su séptimo anillo como premio.
Habrá de verse con qué animo jugará Rodgers, con esas ásperas relaciones con el equipo y con dos mariscales estrellas del colegial, ansiosos en la banca porque cometa un error o se lesione. Tal vez Aaron sea el mejor quarterback en habilidad individual de la historia, pero tal vez, calladito juegue más bonito, dicho con respeto… y vaya que soy su fan.
Y de ahí… a lo que sigue.
Herberto de la Rosa