Durante siglos la cartografía abrió mercados, rutas comerciales, acceso a recursos minerales, a cultivos, permitió el paso de aventureros y conquistadores para después permitir que reyes y gobernantes conocieran la extensión de sus dominios.
Hoy en día, a partir de conocer dónde están muriendo las personas en nuestras ciudades, los mapas también nos sirven para salvar vidas. Durante décadas, las políticas urbanas partieron del sentido común del alcalde o funcionario en turno, de corazonadas o intuiciones más que de herramientas informativas como las que hoy están disponibles.
En Jalisco, la Secretaría de Transporte firmó un convenio de colaboración con el Instituto de Información de Estadística y Geografía para generar un mapa de siniestralidad, una plataforma de seguridad vial. Gracias a este mapa y a la georeferenciación de los hechos viales, puede observarse en qué intersección hay más hechos viales, quiénes estuvieron involucrados, cuántos fallecidos hubo en esos puntos, número de lesionados, qué edades tienen o tenían, sexo, hora y día de ocurrencia de los choques, colisiones o siniestros, tipo de vehículo, etc.
En la plataforma, basada en OpenStreetMap, un software libre colaborativo, se puede observar, por ejemplo, que en el cruce del Periférico con la avenida Jesús Michel han ocurrido 53 siniestros con alguna muerte y/o lesión, 168 involucrados y diez muertes. Los involucrados fueron 20 peatones, 90 conductores y 58 pasajeros.
Con esos datos sería incomprensible e inaceptable que las autoridades responsables no tomen medidas para evitar más muertes en ese punto, no hay cabida para la resignación.
Bajo el enfoque del Sistema Seguro y alineada a los objetivos de desarrollo sostenible de la Organización de las Naciones Unidas, esta plataforma de siniestralidad busca mejorar el sistema de vigilancia y monitoreo de la seguridad vial, según explica Saúl Alveano, coordinador del Sistema Seguro de la Secretaría del Transporte de Jalisco.
No es la primera de su tipo. Está diseñada ex profeso, tras revisar plataformas similares en Toronto, Nueva York y Fortaleza (Brasil) entre otras ciudades y lo que se busca es evitar la mortalidad. “Los seres humanos van a seguirse equivocando pero sí podemos reducir la mortalidad, ya lo ha dicho la OMS, con intervenciones puntuales”, cuenta Alveano.
La Secretaría de Salud federal. junto con el INEGI. cuenta con una plataforma diferente, ATUS (Accidentes de Tránsito Terrestre en Zonas Urbanas y Suburbanas), que concentra la estadística global, pero no este tipo de acercamiento.
En la Ciudad de México aunque se cuenta con un portal de datos abiertos no hay herramientas de visualización similares en los casos de muertes. Lo bueno de que estén a la vista los datos, sin embargo, ha permitido iniciativas ciudadanas para mapear hechos viales por alcaldía.
También en el Instituto de Geografía de la UNAM el doctor Luis Chías y su equipo han realizado esfuerzos similares. Ojalá y pronto proliferen iniciativas similares que frenen la epidemia de muertes viales en México.
Héctor Zamarrón
@hzamarron