Después de la euforia de la agencia libre, los ojos de la NFL ahora están enfocados en el Draft 2024, el cual se llevará a cabo el 25 y 26 de abril, sin embargo en esta edición quiero analizar el mejor Draft, a mi parecer, que ha tenido la NFL en los últimos 50 años, se trata de la “camada” de 1983, donde al menos 7 de sus jugadores están en el Salón de la Fama en Canthon, Ohio.
En este Draft de 1983 el talento se respiraba en todas las posiciones, y no solamente en la posición de quarterback que es la que más llamaba la atención, dado que en primera ronda fueron seleccionados 6 pasadores, de los cuales 3 son Salón de la Fama y uno más llegó a disputar un partido de Super Bowl.
El primer seleccionado del Draftde 1983 fue el quarterback de Stanford de nombre John Elway, un joven pasador con un brazo sensacional, que lo mismo podía jugar baseball que football, pero que se decidió por este último deporte.
Elway no fue seleccionado por los Denver Broncos, sino por los Baltimore Colts, un equipo muy malo en ese entonces y con quienes se negó a firmar, por lo que de inmediato fue negociado a Denver, el resto es historia, jugó con ellos 16 temporadas, tuvo 9 campañas de Pro Bowl y ganó 2 Super Bowls, además de que perdió otros 3 y es un “inmortal”.
El segundo jugador seleccionado no se quedó muy atrás en calidad, se trata del running back Eric Dickerson, quien fue seleccionado por los Ángeles Rams y quien tuvo una trayectoria por demás ejemplar, con 6 apariciones en el Pro Bowl, además de 5 selecciones All Pro y por si fuera poco 8 campañas superando las mil yardas, incluso en una superó las 2 mil, situación que le generó merecimientos dignos para ser seleccionado al Salón de la Fama.
En el sexto lugar fue seleccionado por los Chicago Bears el tackle Jimbo Covert un jugador que solamente jugó 8 temporadas, pero lo hizo de manera brillante y fue suficiente para ser inducido al Salón de la Fama.
En el noveno turno, los Houston Oilers seleccionaron a un de los mejores gaurdias en la historia en la persona de Bruce Matthews, un jugador que fue titular indiscutible por 19 temporadas, de las cuales en 14 fue seleccionador al Pro Bowl y en 7 de ellas fue All Pro, se retiró en 2001 jugando para los Tennessee Titans después de 296 partidos disputados.
En el turno 14 los Buffalo Bills seleccionaron al mejor quarterback que han tenido, Jim Kelly quien llegó procedente de la Universidad de Miami y quien los llevó a cuatro Super Bowls, que aunque no ganaron ninguno, no se puede poner en tela de juicio su calidad dentro del emparrillado, incluso llegando a 5 Pro Bowls.
Otro pasador destacado que fue seleccionado en esta ronda en el lugar 27 fue Dan Marino, el que para muchos ha sido el jugador más talentoso que ha jugado la posición, los Miami Dolphins lo seleccionaron proveniente de la Universidad de Pittsburgh y brilló intensamente en la liga por 16 temporadas, de las cuales en 9 llegó al Pro Bowl, aunque solo llegó a un Super Bowl y lo perdió con Joe Montana, eso no impide que sea considerado uno de los más grandes pasadores en la historia.
Cerramos esta primera ronda con los jugadores que alcanzaron Salón de la Fama con un cornerback, el cual por muchos años fue el jugador más veloz de la liga, se trata de Darrell Green, quien fue seleccionado por los Washington Redskins y quien jugó a nivel sensacional por 15 años, algo no muy común en su posición y en las cuales alcanzó 7 nominaciones al Pro Bowl.
Este Draft fue famoso por la cantidad de talento que hubo en quarterbacks, donde además de Elway, Kelly y Marino también fueron seleccionados pasadores buenos como “El pies de plomo” Ken O´Brien por los New York Jets, el mismo Tony Eason que llevó a New England Patriots a su primer Super Bowl y el único malo de esa primera ronda fue Todd Blackledge de los Kansas City Chiefs.
Otro jugador que merece un lugar especial, aunque en otra posición es el ala defensivo Richard Dent de los Chicago Bears, quien fue tomado en la octava ronda y quien también llegó al Salón de la Fama, producto de cuatro apariciones en el juego de Pro Bowl y 137.5 capturas de quarterback en su trayectoria.
En la defensiva en este draft estuvieron grandes jugadores, aquí le enumero algunos, que si usted supera los 40 años de edad seguramente le sonarán familiares: Joey Browner de los Minnesota Vikings, Karl Mecklenburg de los Denver Broncos, el estelar de los Kansas City Chiefs, Albert Lewis, el ala defensivo Charles Mann de los Washington Redskins, así como Leonard Marshall de los New York Giants y Greg “El Rijoso” Towsend de Los Ángeles Raiders.
A la ofensiva le mencionaré jugadores que no llegaron a ser Salón de la Fama, pero que sin problema pudieran haber logrado un lugar por sus trayectorias brillantes, tales como el running back Roger Craig de los San Francisco 49ers, el receptor Mark Clayton de los Miami Dolphins, el centro Don Mosebar de Los Angeles Raiders, el receptor de Los Angeles Rams, Henry Ellard, el centro Jesse Sapolu de los San Francisco 49ers.
Vaya, hasta en equipos especiales hubo talento en ese draft, con el moreno punter Reggie Roby de los Miami Dolpins, aquel que jugaba reloj.
Para finalizar, me permitiré hacer un equipo ideal de jugadores del Draft de ese 1983, para que usted juzgue el nivel que hubo en dicho reclutamiento:
Como centro pondría a Don Mosebar de los Raiders, como guardias a Bruce Matthews de los Oliers y Mark Bortz de los Bears, como tackles a Chris Hinton de los Colts y Jimbo Covert de los Bears, como ala cerrada a Jamie Williams de los Giants, como receptores a Henry Ellard de los Rams y Willie Gault de los Bears, como running backs a Erick Dickerson y Roger Craig, mientras que de quarterback me iría por John Elway.
A la defensiva como tackles pondría a Mike Pitts de los Falcons y Bob Clasby de los Seahwaks, mientras que como alas estarían Richard Dent de los Bears y Greg Towsend de los Raiders, como apoyadores Billy Ray Smith de los Chargers, Darryl Talley de los Bills y Riki Ellison de los 49ers, mientras que para cornerbacks tendría a Albert Lewis de los Chiefs y Gill Byrd de los Chargers, para cerrar con safeties y considerar a Darrell Green de los Redskins y Joey Browner de los Vikings, un cuadro de lujo sin duda alguna.
Difícilmente en 2024 tendremos un draft con el mismo talento, pero ojalá y los equipos puedan encontrar tres o cuatro jugadores que al menos puedan ser titulares indiscutibles y porque no, ayudarles a reducir la nomina a sus equipos en una época en la que el tope salarial causa estragos para crear dinastías.