Política

La indignación

Escuchar audio
00:00 / 00:00
audio-waveform
volumen-full volumen-medium volumen-low volumen-mute
Escuchar audio
00:00 / 00:00

Al presidente Andrés Manuel López Obrador lo indigna cualquiera que pretenda ganarle en ello. Él quiere detentar el monopolio de tal sentimiento. No importa causa tan irrefutable como las de las víctimas de la violencia, las mujeres objeto de abuso o los padres de menores con cáncer. Nadie puede superarle. No lo pueden hacer los LeBarón, Javier Sicilia, Denise Dresser, Alberto Athié o quien sea. En su imaginario y estructura moral solo él tiene derecho a la indignación, lo demás es patraña o como en el caso del movimiento feminista, embestida de los conservadores en su aviesa pretensión de echarlo del poder.

La empatía entre la sociedad y López Obrador resultaba del sentimiento de indignación. Votar por AMLO fue el vehículo para rechazar el régimen corrupto, situación que se potenció al confirmarse la venalidad y frivolidad ilimitadas de la gestión de Enrique Peña Nieto. La condena al pasado inmediato construyó un profundo vínculo emocional entre el mandatario y la sociedad. Los niveles de aceptación se elevaron hasta 80 por ciento, una proporción considerablemente mayor a la que le votó.

El “no somos iguales” es la referencia empática entre el líder y los mexicanos por el rechazo a lo que había. No es cuestión de razones ni de información, es de emociones, el espacio natural de López Obrador. Sin embargo, ya en el poder cambió: toda acción disruptiva o crítica habría de interpretarse como amenaza a su proyecto. La lucha política propia de la disputa por el poder se volvió complot. Tesis creíble desde la oposición, absurda desde el poder. No hay golpismo ni conjura contra su gobierno. Lo que sí existe son las diferencias propias de la política y la insatisfacción e indignación por la situación que se padece. Además, la oposición formal e informal como nunca está disminuida y las libertades son objeto de recurrente intimidación desde el poder.

La paranoia presidencial se vuelve contra él. La relación empática entre el ogro filantrópico y los mexicanos resistía las malas decisiones, el ridículo o las pésimas cuentas del gobierno. Las emociones dan para mucho, aunque no por mucho tiempo, ni para todo. Lo que no resiste es que el Líder comprometa el vínculo emocional entre él y la sociedad al negar el derecho a la indignación. El Presidente se vuelve igual a los de antes, complaciente, sin capacidad para entender el descontento con la realidad y los malos resultados del gobierno.

El descontento vuelta indignación es el signo de estos tiempos y ha sido el combustible que llevó a López Obrador a la Presidencia. La indignación previa a las elecciones trascendía ideologías, edades, ingreso, educación, regiones o modos de vida y de ese tamaño fue la magnitud del fracaso del partido en el gobierno y el triunfo del proyecto disruptivo. La elección de 2018 fue un acto de venganza y también de reivindicación: el derecho a la indignación.

Algunas feministas se sorprenden por la actitud presidencial. No debiera ser, López Obrador imagen y proyecto es la representación más acabada del régimen patriarcal. Si una figura pública personifica las actitudes y valores del padre padrone sin duda es López Obrador. En eso sí ha cumplido a cabalidad. Desde luego que no es lo que el país y la realidad demanda, pero es lo que la indignación llevó al poder.

La indignación no es un cálculo ni siquiera una decisión. Es un sentimiento que gobierna voluntades y por igual construye que destruye realidades e instituciones. A López Obrador, de siempre, le incomoda que no sean los suyos los que tomen la calle, los que alcen la voz, los que reclamen. Lo que ahora se perfila por la persistencia de la indignación no es un juego de los conservadores es una realidad de la que él y su movimiento habían formado parte y su éxito a ello se debió. Su estructura moral patriarcal no le da para entenderlo y a much@s, sus otrora seguidor@s tampoco les da para entenderlo. 


[email protected] · @berrueto


Google news logo
Síguenos en
Federico Berrueto
  • Federico Berrueto
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.
Queda prohibida la reproducción total o parcial del contenido de esta página, mismo que es propiedad de Notivox DIARIO, S.A. DE C.V.; su reproducción no autorizada constituye una infracción y un delito de conformidad con las leyes aplicables.