Benito Juárez, Benemérito de las Américas acuño un precepto: "Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz", sirva esta máxima para entender los cambios que el senado de la república llevó a cabo el jueves 26 de octubre pasado a la Ley Federal de Telecomunicaciones.
Los Senadores aprobaron con 72 votos a favor, 13 en contra y tres abstenciones los cambios a la Ley Federal de Telecomunicaciones y Radiodifusión. Los legisladores del PRD, PT-Morena y algunos del PAN abandonaron la sesión, mientras se conjuró el dictamen de estas modificaciones bajo la aprobación de los partidos PRI, PAN y Partido Verde. ¿Pero qué fue lo que se modificó, y que llevó a tales actitudes de abandono del pleno? Básicamente los concesionarios de emisoras de televisión y radio abiertas estaban obligados a diferenciar entre los contenidos noticiosos que emitían de las opiniones y la publicidad dentro de la programación. Los Lineamientos Generales sobre la Defensa de las Audiencias, que fue como se ha llamado a los derechos de las audiencias que fueron modificados este jueves pasado; estos lineamientos prohibían transmitir publicidad o propaganda presentada como información periodística o noticiosa.
Me parece a mí que ya somos mayores de edad, en realidad cada quien sabe que medio y opinión toma a su favor. Y aquí es donde yo me pregunto: cómo pretendían hacer que los televidentes o radioescuchas pudiéramos estar escuchando y viendo cintillos que nos advirtieran: - "lo que diré a continuación es opinión del reportero, del conductor o de la producción..." La verdad sea dicha es que estas propuestas de hacer diferenciar lo que un informador dice desde su propia opinión y lo que es meramente información es tan difícil de purificar que sí que se detenta contra el derecho a la propia expresión de la información por los medios de comunicación.
A mi juicio es tan absurdo estar enunciando y diferenciando qué es opinión o bien qué es información propagandística o publicitaria, de lo que es la información pura, como querer encontrar en elementos simples los componentes de los contaminantes del aire nuestro de cada día.