Un México mejor que hace seis años, es el preámbulo de la despedida oficial del Presidente Enrique Peña Nieto, una que tardará 12 días, anunció. Un México mejor que el de Felipe Calderón, entonces.
“En estos siguientes doce días tendré la oportunidad de dirigirme a los mexicanos, lo quiero hacer de una manera que me permita compartir vivencias, experiencias, momentos que marcaron mi administración…” dice en un video que vale la pena revisar.
Podríamos apostar que serán las casi desahuciadas reformas, que nacieron del Pacto por México, unión partidist que a la postre sería el antecedente directo del fracasado Frente por México, que fragmentó al PAN y sepultó al PRD, el pasado junio.
“... momentos de transformación, a dónde estamos llegando a la conclusión del 6 año”.
En sus doce días reciclará “las cosas buenas casi no se cuentan pero cuentan mucho” y evocará su paso sexenal en logros de imagen y video, pero la percepción colectiva tiene casi adoptada la forma del recuerdo, superlativo a la experiencia ciudadana: la Reforma Educativa en Elba Esther, la Energética en el precio de la gasolina, la Hacendaria en dólares de 20 pesos; el PRI en la debacle; la seguridad con más muertos que Calderón; la obra pública en la Casa Blanca; su gobierno en AMLO.
Su trayecto ha sido superado por su facilidad generadora de memes hacia una sociedad de fragilidad cognitiva, donde la sobre exposición de sus “errores” y la burla mexicanísima en las redes sociales, burla-venganza saciada en masa, le generan, favorablemente, un menor estigma y odio que el de Felipe Calderón en el preámbulo de su salida, pero con una endeble imagen a futuro.
“Está es una tarea que todavía no está agotada, ni está completa, pero sin duda, los cimientos que se han dado favorecerán…”
Pero de todo, el hombre del copete brillante y el adjetivo sucio, cierra su video de voz entrecortada (quizá un efecto prediseñado) con un momento de autocrítica, entre su positivismo, la urgencia de transición decorosa, y la subliminalidad evocada sobre lo que viene.
“Si bien he de reconocer que hay asignaturas en las que los esfuerzos realizados no fueron suficientes, o no alcanzaron los objetivos trazados, también me voy con la satisfacción de que el México que entregamos hoy sin duda es mejor que el México que había hace seis años”.
A la Rolling Stones, “he can’t get no satisfaction, ‘cause he try and he try and he try and he try…”
