Los manantiales de Taxhidó en la Sierra que divide a los estados de Hidalgo y Querétaro, son desde hace mucho tiempo tierra sin ley.
El patrimonio natural del país, que por bendición geográfica recae en la vecindad donde habitan pobladores de los municipios de Tecozautla en Hidalgo y Cadereyta, Querétaro, ha permitido el aprovechamiento económico de la zona sin ningún ordenamiento, lo cual ha traído consigo problemas como el de hace una semana, cuando un joven de 18 años perdió la vida tras ahogarse en el sitio.
Como ese, hay varios reportes en la zona en donde se detalla cobro excesivo por transitar en donde debe ser vía libre para todas y todos, cobro por persona para sumergirse en las aguas del manantial, cobro por pasar en comunidades, y todo con el conocimiento de los alcaldes Joel Elías Paso de Tecozautla y de Cadereyta, Miguel Martínez Peñaloza, y no solo de ellos, de anteriores y anteriores administraciones.
Al sitio hay que descender en automóvil desde la comunidad de Manguani, donde hay una cadena, en la cual exigen pagar 70 pesos por automóvil para que continúes el libre tránsito, cosa que no se transparenta ante ninguna autoridad.
Reportes de la zona detallan que existe control de la misma por personas de Cadereyta, en específico dos hermanos de nombre Óscar y Arturo, quienes se han encargado hacer cobros por meterse al agua que van desde los 30 y hasta 50 pesos, y en caso de no pagar se amedrenta a los bañistas y hasta pretenden golpearlos, como ocurrió hace poco con un turista de Canadá.
Dichas actitudes han ocasionado problemas en la comunidad de Manguani que es donde se cobra la cuota fija de 70 pesos por vehículo por parte de la población sin saber en qué se ocupa el dinero recaudado porque no hay mantenimiento al lugar que es de acceso complicado.
Esperemos que tras esta tragedia que se le suma los problemas territoriales de Taxidhó entre Cadereyta y Tecozautla, se pongan de acuerdo las autoridades para así acabar con ese grave asunto de los cobros sin sentido que solo ahuyentan al turismo.
Sería interesante la intervención de Contraloría del estado de Hidalgo para que se revisen de manera minuciosa las arcas municipales de Tecozautla, y lo mismo de Cadereyta, ya que según estos recursos obtenidos por en el lugar van a las finanzas de ambos ayuntamientos.