Ayer se instaló la 65 Legislatura del Congreso de la Unión en San Lázaro, en la que quedó conformada una buena presencia de personajes hidalguenses de quienes se espera una sola cosa: que aporten las gestiones y presupuesto que la entidad requiere.
Son 14 diputados federales que representan al estado en la Cámara federal y que comenzaron una labor que tendrá que verse reflejada en el corto plazo, de aquí a diciembre, con la conformación del paquete económico 2022 y las obras que requieren recursos para todas las regiones.
Luego de tres años en donde se careció de una voz fuerte para Hidalgo en el Congreso del país -seamos sinceros, nunca hubo algo destacado-, se tiene una nueva oportunidad en la que se consoliden temas como los recursos extraordinarios que tanto ayudaban en anteriores sexenios. Se sabe que ya no hay programas sociales a destajo, ni tampoco se permite por cuestiones de la agenda presidencial y de Morena, que los demás grupos puedan disponer del presupuesto con mayor amplitud, pero existe una posibilidad de que a Hidalgo le vaya mejor el siguiente año.
Si bien de 2018 a la fecha solo se otorgaron los recursos limitados, con muy pocas bolsas concursables, hoy se debe demostrar que los 14 legisladores están ahí para hacer valer los derechos de los hidalguenses y no los proyectos personales. La realidad apremia en el estado, la cifra de pobres creció como en todo el país por la pandemia y la falta de oportunidades, y por ende se espera que sean los diputados federales los que lleven las necesidades a la máxima tribuna y soliciten que se apliquen los recursos cuanto antes.
Veremos en las próximas semanas quiénes destapan sus verdaderas intenciones y quiénes solo repitieron para poder sentarse en una curul y tener una posición política. Son 14 diputados, son 14 voces, son 14 perfiles que deben defender a Hidalgo.
@laloflu