Que la reunión entre Joe Biden y Andrés Manuel López Obrador salió mejor de lo esperado, entre otras cosas, porque la Casa Blanca trae el plan de relanzar Norteamérica como una región que compita frontalmente con China y, a diferencia de Donald Trump, cuya acción iba hacia la desindustrialización mexicana, la nueva visión pasa por el corredor Ottawa-Chiapas, la supercarretera de comercio TLC que tanto molestaba al magnate, y por eso se revivió el Diálogo Económico de Alto Nivel de América del Norte.
Que no deja de llamar la atención que el mismo día del anuncio de una nueva tarea para los militares, el control de todas las aduanas a lo largo de la frontera de Tamaulipas, que se suma a la construcción del aeropuerto Felipe Ángeles y a algunas obras del Tren Maya, un espontáneo se le haya aparecido a AMLO en plena conferencia mañanera sin un solo elemento de protección que se lo impidiera.
Que apenas se supo de la nueva encuesta de Morena para definir candidato a gobernador de Guerrero, Félix Salgado Macedonio y Beatriz Mojica alzaron la mano y se unieron a los ya autodestapados Nestora Salgado, Luis Walton y Adela Román Ocampo. Si vuelven a designar al senador con licencia, será interesante conocer los mensajes de ese partido el próximo domingo, Día Internacional de la Mujer.
Que el asesinato del líder empresarial Julio César Galindo en San Luis Potosí llamó la atención sobre la crisis de inseguridad que azota al estado gobernado por el priista Juan Manuel Carreras, quien condenó el hecho, expresó sus condolencias y afirmó que se aplicará todo el peso de la ley, es decir, el gastado estribillo de los que no saben qué hacer con la delincuencia.