Que los partidos andan preocupados porque desde las comisiones de Igualdad de Género y de Prerrogativas del Instituto Nacional Electoral, que presiden las consejeras Carla Humphrey y Claudia Zavala, se impulsa la figura de paridad total en el Congreso y se pretende aplicar ya ese criterio en la designación de diputados de representación proporcional para la siguiente Legislatura: fifty-fifty. Por eso los representantes de las distintas fuerzas ante el INE prefirieron buscar directamente a su presidente, Lorenzo Córdova, con la esperanza de que en su calidad de hombre detenga una medida que ya está en la ley.
Que a quien Morena está dejando solo y aislado de la 4T es al superdelegado federal en Tamaulipas, José Ramón Gómez Leal, que para más señas es cuñado del gobernador emproblemado, Francisco Javier García Cabeza de Vaca. Primero le cerraron el paso para competir por la alcaldía de Reynosa, luego se entera por los medios de que lo tienen en la mira la Unidad de Inteligencia Financiera y la Fiscalía General de la República, y después hasta en los reportes de Estados Unidos lo involucran.
Que otro morenista non grato en su partido es Irineo Molina, candidato a presidente municipal de Tuxtepec, Oaxaca, pues una corriente del partido en el estado ve riesgos en la elección en puerta debido a que al aspirante se le relacionó en 2016 con un daño al erario por 16 millones y medio de pesos, de acuerdo con un informe público de la Auditoría Superior de la Federación, y se brincó el proceso de entrega-recepción que marca la ley cuando culminó su gestión municipal en San José Chiltepec.