Que la respuesta del secretario de Salud, Manuel de la O, a la exigencia de cumplir y hacer cumplir la Constitución y el respeto a los derechos humanos de los mayores de 65, fue la de un niño pequeño.
Parece que la popularidad que la televisión le dio con sus conferencias diarias le hizo algún daño emocional, porque no entiende que se trata de un asunto de libertad garantizado en la Constitución, además de que no se preocupa por los viejos que a diario usan el transporte público.
Que no es gratuito el duro cuestionamiento que le hace también el Clúster de la Industria del Entretenimiento, Deporte y Alimentos (Cieda) al gobierno estatal por ceder el poder de todas las decisiones económicas relacionadas con la pandemia “a un grupo de doctores”.
Argumentan en su queja que, si bien se trata de profesionales de la salud, desconocen cómo equilibrar el bienestar social y económico de la comunidad.
Que en estos próximos días habrá una reunión con empresarios, quienes estarán encabezados por Alfonso Romo.
Estará como invitado el embajador de México en Estados Unidos, Esteban Moctezuma. Será el primer acto o visita “oficial” con los capitanes de empresa regiomontanos.
Que el candidato del PRI a la gubernatura, Adrián de la Garza, regresará mañana a tomar las riendas del gobierno de Monterrey con dos objetivos principales: el primero, entregar la administración de manera definitiva.
Y el segundo, “analizar y resolver trámites pendientes, con el fin de proteger los derechos político-electorales de los candidatos”, según difundió anoche en su cuenta de Twitter.
Que con la guerra sucia ya desatada, la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales que encabeza Gilberto de Hoyos Koloffon firmó un convenio de civilidad con los partidos políticos.
¿Tendrá algún sentido un acuerdo que nadie respetará? Por algo dicen que de buenas intenciones está tapizado el camino al infierno.