Que durante la primera sesión ordinaria de Cabildo, de Torreón a inicios de esta semana llamó la atención la ausencia de participaciones de la bancada de Morena y, por el contrario, el respaldo a los primeros pasos de la gestión del alcalde Cepeda González. Los malpensados ya ven un “primor” dentro del cuerpo edilicio. Mientras que quienes se toman en serio su papel de oposición fueron los panistas Alma Fong y José Armando González Murillo argumentando falta de equidad de género en nombramientos municipales y desacuerdo con la designación de convocatorias para consejos.
Que mucha es la actividad que traen aquí en Torreón el gobernador Miguel Riquelme Solís y el alcalde Román Alberto Cepeda González que en acciones conjuntas, le entraron el lunes pasado a la reactivación de las brigadas de limpieza, ahora bajo el nombre de “La Ola” en el que inicialmente participan 200 entre hombres y mujeres listos para darle la necesaria “barrida” que la ciudad necesita.
Y hoy viernes dan el banderazo a lo que será una amplia cruzada de fortalecimiento de la infraestructura social municipal, con los trabajos para “rescatar” de manera integral, la “Línea Verde”, allá por Residencial del Norte y que en estos últimos años, ya se conocía como la “Línea Gris”, porque se dejó secar todo y es sólo tierra, donde eran áreas verdes.
Que el morenista Luis Fernando Salazar Fernández aprovechó la postulación de Carolina Viggiano como candidata a gobernadora por Hidalgo para criticar a sus excorreligionarios del PAN, luego de que fue el blanquiazul el que hizo la propuesta dentro de la coalición PRI-PAN-PRD. Salazar Fernández justificó en redes sociales su salida del PAN, se refirió a Rubén Moreira, a la “megadeuda” de Coahuila y hasta vaticinó que el año entrante sí habrá coalición en esta entidad entre los citados partidos. Obviamente, el ex niño azul busca abanderar a Morena para que haya alternancia en Coahuila.
Que quien no se quiso quedar callado y evidenciar lo que sucede al interior de Morena fue Carlos Medina, quien al ser cuestionado si se registraría como precandidato se limitó a contestar que no lo haría ya que es inútil pensar y creer que los candidatos serán electos por asambleas democráticas o por encuestas reales cuando se sabe que todo será repartido entre la cúpula. ¡Zas! duro golpe.