Que en Durango capital no se colocaron festones negros por la despenalización del aborto en templos católicos como sucedió en otras regiones del país, para protestar la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. La única voz en contra fue la de Faustino Armendáriz, arzobispo de Durango, quien calificó como lamentable el veredicto de la SCJN.
Que en la capital los grupos feministas han presionado al Congreso local para que se aborde el tema a la brevedad, puesto que se cuenta con un marco legal idóneo para que se legisle.
Que entre mesa y mesa, se les vio a José Ramón Enríquez Herrera y a Manuel Espino en la Ciudad de México, pregonando su lealtad a las huestes morenistas. Es bien sabido que buscan posicionarse, pero para muchos, el reto se encuentra en el movimiento fundado por el presidente mexicano.
Las guerras intestinas y de las cuales, en su momento, Espino y Enríquez serán parte, les permiten emprender estrategias para ser conocidos y ubicados por el electorado. Cabe mencionar que ambos, por sus propios intereses cambiaron de partido, de postura ideológica. Incluso, hasta de estilo. Ambos tienen opciones en otros partidos, pero MORENA es garantía en el corto plazo de votantes. Eso es bien sabido. Las arengas están por venir, por lo pronto, mensajes van y vienen. Patadas bajo la mesa para jalar a un lado a los y las contrincantes.
Que no se sabe si le dieron autorización por parte del sub Comité de Salud Laguna pero lo cierto es que las autoridades de Torreón metieron más de 3 mil personas a la Plaza Mayor, para celebrar el Grito de Independencia. No había dispensarios de gel antibacterial, así como equipos para tomar la temperatura y el uso de cubre bocas fue escaso, porque ya entrados en gastos, varios se pusieron a bailar con la música del mariachi al Son de la Negra.