Que la muerte de Gerardo Ruiz Esparza, quien fuera secretario de Comunicaciones y Transportes con Enrique Peña Nieto, no solo activó al ex Presidente, también a varios ex priistas y militantes del tricolor en la entidad, quienes recuerdan el trato y las visitas efectuadas en su paso como funcionario público. Por un momento no hubo pleitos.
Que los morenos tamaulipecos le piden al superdelegado federal José Ramón Gómez Leal ya no cometa tantas pifias en la entrega de apoyos sociales a beneficiarios. Aseguran que más allá de tratar de ayudar, solamente perjudica la imagen de la 4T, pues señalan impera la desorganización y, en muchos casos, la falta de comunicación.
Que la iniciativa de la diputada federal Olga Sosa Ruiz y sus compañeros de la bancada del Partido Encuentro Social, sobre donar tres meses de su sueldo al personal de salud que atenderá a potenciales enfermos del covid-19, le dejó una vara muy alta al resto de sus colegas tamaulipecos, tanto en las cámaras alta y baja, como en la legislatura del estado.
Que en la zona hay más casos de covid-19 en Madero, lo que tiene a los médicos y enfermeras del Hospital Civil algo nerviosos y renegando, pues si el nuevo nosocomio estuviera operando, los riesgos serían menos. Lo que no se entiende es por qué la Auditoría Superior de la Federación no ha fincado responsabilidades contra los culpables de que la obra no se haya concluido, y cómo es que el diputado Erasmo González, a pesar de ser parte de la comisión de Cuenta Pública, no mete las manos.
Que se escucha más fuerte que Andrés Manuel López Obrador podría venir el sábado a Tamaulipas para retomar la gira por el norte del estado que dejó pendiente en meses pasados; se manejaba que el Presidente quería venir a Reynosa, quizá Nuevo Laredo, pero en especial a Matamoros, donde gobierna el alcalde morenista Mario López, a quien no le escatima apoyo para infraestructura vía Sedatu.
Que con un cubrebocas se reunieron a sesionar en comisiones los diputados locales encabezados por Gerardo Peña, a pesar de que según autoridades sanitarias, la gente que está sana no debe ponérselos, pues hay que dejarlos para los enfermos y el personal de salud que los atiende. _
