Que el pleito casado entre Morena y PAN en Tamaulipas no comenzó este martes, sino desde el domingo por la tarde, al ver a Carlos Peña Ortiz levantarle la mano a Américo Villarreal Anaya. Esto causó primero consternación y después enojo entre los azules, pues daban por un hecho la adhesión (o regreso) a sus filas de la madre del alcalde de Reynosa, Maki Ortiz.
Que todavía sin digerir la “afrenta o traición”, las palabras fuertes de Makito contra los adversarios de la 4T calentaron el ambiente, cuyo punto vino con el reparto de acusaciones donde se unió el gobernador Francisco García Cabeza de Vaca. Falta que este clima polarizado entre actores importantes en el estado contagie a la mayoría de los votantes, todavía distantes de la sucesión.
Que la campaña prosigue y Villarreal Anaya celebró a las madres de Ciudad Madero en la Unidad Deportiva, donde lo recibió el tesorero del Ayuntamiento Carlo González. La significativa fecha no pasó desapercibida para César Verástegui Ostos y Arturo Díez Gutiérrez con mensajes en sus redes sociales, al subir fotos con sus mamás y esposas.
Que el ex alcalde de Ciudad Victoria, Xicoténcatl González, apareció en el festejo del 10 de mayo con las burócratas. Todos se quedaron con las ganas de verlo bailar, como solía hacerlo.
Que la convivencia de Movimiento Ciudadano con mujeres del sábado pasado en el salón del PRD de Ciudad Madero comenzó a crear conflictos contra la delegada municipal Esther Mendoza. Trascendió, el grupo de David Valenzuela, Carlos Guerra y Francisco Tobías Sigala la quieren fuera del instituto político pero no por lo sucedido, sino para administrar el local.
Que otro caso se dio días antes entre los nuevos dirigentes del sol azteca. Tobías Sigala intentó entrar a la fuerza a dicho recinto, sin autorización. Al ser impedido, aseguran que el coordinador en Tampico agredió a un vigilante de la tercera edad. Ya se maneja una denuncia, en tanto esto, en lugar de sumar a la alianza con PAN y PRI, solo causa problemas. _