Que la algarabía sigue en filas morenistas, caso contrario en cabecistas al caerles el resultado de la elección como balde de agua helada. Ni Francisco e Ismael García Cabeza de Vaca, ni Gerardo Peña, mucho menos César Verástegui Ostos, aparecen ni en redes sociales para dar su opinión. Dicen panistas que llamaron al 911 para reportar su extravío.
Que quienes salieron a agradecer el apoyo en campaña fueron dos aspirantes panistas, Rosa González de Tampico con un breve mensaje en sus cuentas oficiales, así como Carlos Fernández Altamirano en Ciudad Madero. Este último felicitó a Erasmo González por su victoria, aunque se dijo sorprendido por la notable diferencia en los números.
Que en cuanto a reacciones por la lucha rumbo al Senado, Eugenio Hernández del Verde reconoció su derrota pero sin decidir nada de su futuro político. Lo curioso, su adversaria hasta en el discurso, Cendy Robles, solo dio gracias aunque en las cifras, la cantidad de votos nulos fue superior a las preferencias logradas por la representante del PT.
Que es muy probable que en el reparto de las diputaciones plurinominales, solo Paloma Guillén Vicente llegue por el PRI a la nueva Legislatura de Tamaulipas. ¿Hará mancuerna con los panistas cabecistas que también accedan? No la tienen fácil, todo el tiempo tendrán la aplanadora morenista encima.
Que el hubiera no existe, pero ir en solitario a la contienda por la diputación local del distrito 22 le costó a Morena la derrota. Y es que Sabrina Morales perdió por mil 646 votos ante Pepe Schekaibán; sin embargo, separados, el Verde obtuvo mil 669 y el PT mil 358, con los que en coalición habrían vencido al panista.
Que Armando Martínez les dijo a colonos de la Serapio Venegas: “Se les pasó la mano, ¿cuántos votos me dieron?” El alcalde anunció una planta potabilizadora portátil, donada por Femsa, que se conectará a un recipiente de miles de litros, regalado por Alpek, para que los vecinos sobrelleven el estrés hídrico.
